Terminado el encuentro de mujeres que se realiza hace 30 años en Mar del Plata para conseguir la legalización del aborto, la disolución del matrimonio y la familia biológica, se realizó como todos los años la llamada marcha de orgullo lésbico. Esta convocatoria finalizó como año anteriores frente a la Catedral de Mar del Plata con insultos de carácter obsceno, cantos de mofa, agresión, gritos y agravios de todo tipo hacia la Iglesia y hacia Cristo.
Al igual que años anteriores, jóvenes cristianos se reunieron en el atrio de la Catedral y rezaron el Rosario como manifestación pública de su fe frente al escandaloso ataque de las abortistas. Este año las columnas del feminismo fueron más agresivas y lograron voltear las enormes rejas de la Catedral, agredieron a la policía y a varios de los jóvenes católicos que rezaban en el atrio.
La marcha enardecida amenazó con quemar la Catedral en medio de desmanes cada vez más violentos. Las fuerzas de seguridad, lograron dispersar la violenta manifestación antes del destrozo interior del Templo.
En las redes sociales se hicieron públicos videos y fotografías que denunciaban el hecho ocurrido en la noche del domingo 11 de octubre.
