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¿Tienes planeado hacer un viaje largo con tus hijos? Para evitar paradas innecesarias y mantener una buena alimentación, te dejamos algunas recomendaciones para que junto con tu familia disfruten de unos ricos snacks y un viaje sin complicaciones.

Los paseos familiares son la mejor excusa para compartir juntos nuevas experiencias. Con una buena lista de canciones y juegos para el viaje estaremos pronto a mitad del camino. Pero no olvidemos planear snacks nutritivos para que el hambre no haga de las suyas en esos largos trayectos.

¡Menos azúcar blanca, más frutas!

No cabe duda que los alimentos de preferencia de los chicos son los dulces. Y no tenemos por qué privarlos de lo que más les gusta. Podemos contribuir a su alimentación con frutas, que dan ese sabor dulce que tanto nos gusta y que no tienen azúcares agregadas. Optemos por la fruta entera y fresca en lugar del jugo que usualmente no contiene fibra dietética y aportan con múltiples nutrientes como vitaminas y minerales. Encontramos alto contenido en fibra en frutas como la pera, frambuesa, maracuyá, higo, ciruela pasa, cereza y manzana. Una manzana al horno con canela o con una cucharada de manjar de leche es un snack ideal para hacer en casa.

Usemos creativamente las verduras

Dejemos de lado el temor a incluir verduras. Podemos usarlas para un dip y/o untarlas crudas con este. El hummus, a base de garbanzos y aceite de oliva, es una excelente fuente de fibra y grasa mono-insaturada. La zanahoria, el pepino, el apio, el pimiento amarillo o rojo en corte juliana, pueden ser un rico acompañamiento. Así como los chips de vegetales de remolacha y cebolla. El Guacamole, tzatziki y una mezcla de salsa Ranch con yogur griego son otras opciones para hacer más apetecibles los vegetales.

Snacks ideales y simples

Otra forma de incluir fibra es a través de cereales integrales como el trigo, la avena, el maíz o frutos secos como el maní y las almendras. Otras opciones son el pan integral, las arepas y la granola, siempre y cuando sean bajas en sodio, grasas saturadas y azúcares agregados.

No pueden faltar los alimentos proteicos como legumbres, peces, aves y carne; y los clásicos sánduches de huevo, jamón o atún.

Tampoco olvidemos la porción de lácteo, indispensable por su aporte de calcio. Alternativas como leche, yogur y queso bajos en grasa proporcionarán sabor y nutrientes a nuestros snacks. Un yogur bajo en grasa sin azúcares agregados con frutas o palitos de mozzarella están entre los favoritos de muchos niños.

Evitemos alimentos procesados por su usual alto contenido en grasas saturadas, azúcares agregados y sodio; así como productos enlatados.

Mantengámoslos hidratados

Si vamos a estar mucho tiempo fuera, o tenemos un viaje muy largo, elijamos agua sobre otras bebidas azucaradas ya que hidratarán a sus hijos durante el viaje sin aportar calorías extra.

¡No olvidar!

Debemos procurar que en todo tipo de viaje los snacks no comprometan la seguridad alimenticia de nuestra familia. Las loncheras térmicas ayudan a mantener la temperatura de los alimentos ya sean fríos o calientes, evitando enfermedades transmitidas por alimentos. Para viajes de largas distancias (más de 4 horas) debemos ser un poco más creativos y escoger alimentos que no se estropeen.

Recordemos que con los menores de 5 años tener cuidado con alimentos pequeños de 1.3 centímetros (como una moneda de 10 centavos) con lo que pueden atorarse; o que sean difíciles de masticar como el maní, el chicle, uvas enteras, tomates cherry o carnes duras.

Por: Rafaela Arosemena
Nutricionista – Dietista Clínica
Ms. en Nutrición y Metabolismo
rafaela.arosemena@gmail.com

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