Un programa de educación para erradicar el trabajo infantil empieza a dar sus frutos.
Centro Educativo “Santiago Apóstol” ha formado a 73 niños y adolescentes proporcionándoles educación primaria y secundaria a través de becas en colegios vinculados al centro. Actualmente, atienden a 50 niños trabajadores de la calle o en riesgo de serlo.
Son ejemplo de ello, Rovin Angulo, de 22 años, Luis Quiñones, de 18, y Sara Lara, de 19, quienes lograron culminar sus estudios el pasado marzo. Rovin asegura que “el dinero no es impedimento para estudiar, ahora hay varias escuelas y colegios que son gratis. El que quiere puede, no importa si tiene o no dinero”.
Rovin, Luis y Sara tuvieron la oportunidad de viajar a Brasil para conocer al Papa Francisco en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), evento que transformó sus vidas.
Ellos continuarán sus estudios universitarios, y demostrarán a jóvenes que viven su misma situación, que es posible superarse. En este momento se encuentran en proceso de adjudicación de plazas universitarias que maneja la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt).