Los padres son la principal herramienta de protección y educación, pero ¿cómo estar cerca si desconocemos qué sucede en Internet?
En la actualidad los niños, niñas y adolescentes están expuestos a muchos peligros y los riesgos digitales son cada vez más frecuentes, no en vano estos se han convertido en el tercer delito con mayor crecimiento en Latinoamérica. El grooming, sexting, sextorsión y pornografía son las principales amenazas con las que conviven nuestros hijos a solo un click de distancia, poniendo en peligro su salud mental y física.
El peligro de lo desconocido
Hoy en día, la pornografía es una adicción tan grave como el alcoholismo o la drogadicción. Por ello, debemos tomar medidas de prevención para evitar que nuestros hijos sean vulnerables ante esta. Al ser menores de edad de una manera ingenua pueden verse envueltos en un mundo en el que la inocencia y la pureza son violentadas. El impacto de la pornografía en la psiquis de un niño puede traer trastornos sexual-afectivos graves para su vida futura, además de alterar su integridad emocional.
Esta situación puede llevarlos a ser víctimas de acosadores cibernéticos (grooming), a exponerse a contenidos no aptos para su edad o ser expuestos íntimamente a través del engaño, simplemente porque no sabían o no eran conscientes de lo que hacían.
Este video nos muestra los peligros de compartir informa-
ción con desconocidos y ante lo que podría enfrentarse.
Manejar contenidos responsablemente
Ante esta preocupación un padre de familia de cuatro niñas decide indagar en cómo enfrentarse a este peligro inminente y nace GuardianKids, una aplicación para proteger a los más chicos de estos riesgos. Esta herramienta ayuda a monitorear lo que sucede con los hijos mientras los padres no están presentes.
Siendo el primer monitor parental del país, su desarrollo está basado en algoritmos de inteligencia artificial que monitorean cada 30 segundos el contenido de la pantalla de la computadora, smartphone o dispositivo electrónico. En el caso de que las imágenes sean de contenido sexual explícito o no apto para menores, es reportado a través de un correo electrónico al padre o adulto responsable.
A diferencia de los controles parentales comunes de los navegadores o dispositivos, este supervisa lo que se proyecta en la pantalla del equipo, sin importar de donde proviene la imagen o el medio de reproducción (USB, CD, WEBCAM, WEB, redes sociales, etc). De esta forma existe una libertad de uso y con un ambiente 100% supervisado, donde el adulto responsable puede estar tranquilo al contar con un aliado que le alertará cuando el menor se encuentre frente a un riesgo digital.
Una oportunidad para atacar
Ante cualquier riesgo digital que se vean expuestos los chicos, de manera temprana, preventiva y orientativa se puede atacar el problema. Si bien, la idea no es tener un espía, es importante hoy en día que los padres estén al tanto de lo que sucede en la vida de los hijos y ninguna aplicación reemplazará la importancia de la comunicación intrafamiliar.
A través de este tipo de herramientas los canales de comunicación entre padres e hijos, educadores y educandos, se pueden enriquecer en el diálogo sobre los riesgos digitales y el buen uso de redes sociales, previniendo y actuando frente a los posibles peligros a los que se pueden enfrentar. Los riesgos digitales son una realidad a la que están expuestos los menores en ambientes educativos y familiares, por lo que es importante cerrar brechas a través de la formación para que no se realicen estos delitos.
Nestnet Group, empresa desarrolladora de cree en procesos integrales, donde el componente tecnológico no debe ir desligado de la educación y orientación oportuna. |
Por Francisco Ojeda J.
Gerente General Guardian Kids.