Automedicarse es peligroso, pero es aun más riesgoso durante la tercera edad.
La muerte por medicamentos se ha convertido en una de las epidemias del siglo XXI. Cada vez existe un mayor número de personas, sobre todo de la tercera edad, que sufren reacciones adversas o que mueren por esta causa.
Principal causa de muerte
Se puede decir que las reacciones adversas a medicamentos es la tercera causa de mortandad en Estados Unidos, donde se reportan entre 75,000 y 137,000 muertes anuales debido a esta causa. En España, estas ascienden a 197,000, mientras que, en Ecuador, el Ministerio de Salud, revela que el 50% de la población del área urbana se automedica, siendo los analgésicos, antiinflamatorios y antibióticos los más utilizados.
Estos datos ejemplifican la relevancia del problema a nivel mundial y el número de pérdidas humanas que se pueden evitar haciendo un correcto uso de los medicamentos.
Combatir la automedicación
El médico es el responsable de prescribir un medicamento y para ello tiene primero que saber cuáles son las enfermedades que padece el paciente, el estado de sus órganos y conocer bien la farmacodinamia del medicamento una vez que ingresa el organismo. Esto es:
- ¿Dónde se absorbe?
- ¿Que unión existe o no a
- proteínas plasmáticas?
- ¿Cuál es la distribución
- en el organismo?
- ¿Dónde se metaboliza?
- ¿Cuál es la vía y forma de eliminación?
La automedicación lleva a que aparezcan reacciones, en ocasiones, no propias al medicamento. Al haber sido mal prescrito en un individuo al que no podía administrase o ingerirlo, su organismo no lo va a tolerar o asimilar (metabolizar o eliminar) adecuadamente.
Esto sucede principalmente con los adultos mayores que ya tienen cierto grado de disfunción hepática o renal.
Sin control médico
Las personas suelen tomar una medicina por consejo de un vecino o un amigo al que “les fue bien”. Debemos aclarar que no son los mismos organismos y ni el mismo medicamento. Lo que a uno le hizo bien, a otro puede producirle graves estragos en su salud.
La misión de la industria farmacéutica, es producir, promover y vender medicamentos, siempre bajo las normas científicas y ensayos clínicos que los certifiquen o avalen. Esto les da cierta seguridad a los médicos sobre qué prescribir.
Por este motivo, como especialistas de la salud nos corresponde recetar correctamente y los pacientes deben ser disciplinados y cautelosos a la hora de consumir cualquier tipo medicamento.
Como consejo, hay medicamentos que por inofensivo que parezcan pueden ocasionar un efecto adverso grave y dependencia en el consumidor.
Por Dr. Eduardo Rizo Díaz
Especialista en Medicina Interna.
Jefe de Servicios Médicos del Hogar del Corazón de Jesús de la JBG
