Por nuestras familias.
Termina el feriado de noviembre, y aún antes de que el calendario indique que ha empezado oficialmente el mes de diciembre, ya se siente la algarabía propia de este mes que trae consigo: Navidad, Fin de Año, cenas de oficinas, encuentros con la familia, encuentros con los amigos, pero de la misma manera, hay tráfico, accidentes y en muchas ocasiones, pérdidas.
Expresemos nuestras emociones sanamente
Si bien el corazón desborda de tantas emociones, es en este momento que ni los abrazos, las lágrimas, o los más excelsos saludos son suficientes para expresar todo lo que quisiéramos decir y es que simplemente hay emociones que son tan sublimes que no logramos tener las palabras adecuadas para esos momentos. Es aquí cuando la creatividad humana entra en acción, poniéndonos en frente un sinfín de accesorios que híper estimulan nuestros sentidos y motivando conductas o actividades que generalmente no ejecutaríamos. En donde aparecen luces y sonidos que nos dan esa sensación de celebración máxima, de lo que surge la pirotecnia. Esta que, si bien puede deleitar entre sonidos y colores, también tiene un registro muy grande de víctimas y afectados.
Practicar pirotecnia nos deja una muy sutil línea que diferencia la celebración y el júbilo, con la tragedia y el dolor. Si existen tantas formas de celebrar, ¿por qué elegir aquella que nos puede hacer daño? Si hay tantas maneras de expresar nuestro cariño a nuestros seres queridos, ¿para qué ser perpetuadores de una tradición que afecta a miles de niños cada año? Si queremos celebrar en familia, debemos elegir coherentemente y así permitir que sea la moderación la que nos guíe con claridad tomar decisiones.
Todos queremos disfrutar de las fiestas y por eso, lo mejor que podemos hacer es cuidar de los nuestros previniendo y evitando que se expongan a este tipo de situaciones. Es imposible pasar por alto los accidentes de tránsito, por cualquier razón, exceso de velocidad, cansancio, en algunos casos de irresponsabilidad e incluso el consumo de bebidas alcohólicas, es por esto que debemos ser aún más “Cautus” y poder así proteger a nuestra familia.
¡Todo lo que hagamos hoy, dará frutos en un mejor mañana! ¡Felices fiestas!
Por Wilson Gómez Váscones
Director de Proyectos
Cautus RRD