La adolescencia es una etapa de preocupación en las familias, y durante muchas generaciones lo seguirá siendo. ¡Lee y comparte!
La adolescencia, es un tema que ha sido visto de manera errada, al ser caracterizada como una de las etapas del desarrollo que más dilemas presenta. Al hablar de adolescencia, estamos refiriéndonos a un período que pasa por cambios radicales y puede verse alterada la manera de actuar, comportarse y sentir del adolescente.
Durante esta transformación que transcurre entre los 10 y los 13 años, es importante tener claras muchas cosas, y como padres mantenernos informados de estas particularidades, donde pasan de ser niños y depender prácticamente de todo, a ser jóvenes – adultos que tratarán de hacer la vida por su propia cuenta, buscando formas de ser independientes de su familia.
Mientras en la infancia, los padres tenían bajo control el modo de criar y autogestionar las problemáticas presentadas en la familia, en la adolescencia, pueden percibir que carecen de herramientas propias para dar solución o entender lo que pudiera estar sucediendo. Sin embargo, esto tiene una respuesta a nivel biopsicosocial, donde cada cambio presentado, debe tener una visión desde la empatía y el respeto.
En la adolescencia empiezan a aparecer los cambios físicos – emocionales producto de su propio desarrollo, se encontrarán con la influencia de la sociedad y su vínculo más cercano, y al ser personas en proceso de autorregulación y autoaceptación, surgen los problemas de autoestima y se refleja el descontrol emocional, que muchos padres lo catalogan como un “problema” en la convivencia familiar.
Para nosotros los adultos, es necesario comprender que todos estos comportamientos, no son más que señales que nos están diciendo que pasan por un proceso de maduración cerebral normal y aquellos adolescentes que cuenten con el soporte y redes de apoyo en el momento adecuado, lograrán cursar esta etapa maravillosa, con experiencias significativas que llevaran consigo durante toda su vida.
Así que, como padres, no hay que perder el control de la situación, ya que no hay nada mejor que hacer de esta etapa, algo significativo y enriquecedor.
¿Qué hacer desde mi rol de papá o mamá?
El rol de la familia durante este proceso de cambio, es trascendental para lograr una adolescencia armoniosa. El trabajo en equipo por el bienestar físico y emocional del adolescente, ayudará en gran medida las relaciones parentales, ellos lograrán percibir que están madurando correctamente, por su interacción con el entorno, es por eso que recomiendo lo siguiente:
- Infórmate y cambia tu percepción de la adolescencia.
- Observa y guía sus pasos.
- Reconoce las habilidades de tu hijo/a y poténcialas.
- Establece límites claros para una mejor convivencia.
- Evita reforzar comportamientos emocionales, que no son provechosos para ellos.
- Mantén el diálogo con ellos, anticipándoles situaciones de riesgo.
- Se afectuoso y hazle saber de tu amor hacia ellos.
- Evita juzgar, eso solo hará que la confianza se deteriore.
- Se su mayor ejemplo, recuerda que ellos imitan lo que observan desde el hogar.
Escrito por: Psic. Ma. Fernanda Vega. IG: psicologafernandav
-
Lee también sobre: Maneras fáciles de prestar atención a tus hijos.
