Compartimos contigo 5 claves para que refuerces tu sistema inmune y mejores tu calidad de vida. ¡Lee hasta el final y comparte!
El sistema inmunológico o inmunitario es un método de defensa complejo y eficaz formado por una red de células, tejidos y órganos, el cual protege y defiende el cuerpo contra miles de virus, bacterias y toxinas.
El ser humano está compuesto y vive con millones de bacterias en todo momento, es por eso que cuidar del sistema inmune es una tarea de todos los días, y esto se verá reflejado en la calidad de vida de cada individuo.
Cuando las bacterias o virus invaden el cuerpo, éstas atacan y se multiplican ocasionando una infección, si ésta no es bien tratada o el cuerpo no lo resiste causa la enfermedad. Por ello, la importancia del sistema inmunitario, ya que éste protege de la enfermedad combatiendo los gérmenes.
El sistema inmunitario está compuesto por las siguientes partes:
- Piel: Evita que los gérmenes ingresen al cuerpo.
- Membranas mucosas: Son los revestimientos internos húmedos de algunos órganos y cavidades corporales. Producen mucosidad y otras sustancias que atrapan y combaten los gérmenes.
- Glóbulos blancos: Luchan contra los gérmenes.
- Órganos y tejidos del sistema linfático: Incluye, timo, bazo, amígdalas, ganglios linfáticos, vasos linfáticos y médula ósea. Producen, almacenan y transportan glóbulos blancos.
El momento en el que el sistema inmunitario reconoce un agente extraño o nocivo, y éste se encuentra sano, tendrá la capacidad de reaccionar, atacar, debilitar y destruirlo. A esto se le llama respuesta inmune, permitiendo que el cuerpo no se enferme.
Claves para fortalecer nuestro sistema inmune
Una vez entiendo la importancia y funcionamiento del sistema inmunológico, compartimos las claves más importantes para estimular y fortalecer el sistema inmunológico y de esta manera evitar infecciones y sobre todo enfermedades:
Alimentación
Todos los alimentos ingeridos juegan un papel importante en las defensas. Su aporte energético debe ser el correcto, por ello, es importante seleccionar bien los alimentos y tener una dieta equilibrada que incluya frutas y verduras, lácteos fermentados y desnatados, pescado, frutos secos, soja, cereales integrales, frutos secos, carnes magras, huevos, cítricos, salmón, pollo, aguacate, espinacas, etc.
Se debe tomar en cuenta los tiempos de cocción y remojo de los alimentos, ya que, al exceder el tiempo, éstos llegan a perder hasta un 90% de sus propiedades.
Estilo de vida saludable libre de tabaco y bebidas alcohólicas
Fumar afecta al sistema inmunitario, ya que, al entrar la nicotina al organismo, ésta disminuye la efectividad de los neutrófilos, que son los encargados de enfrentarse a los microbios, activar una mayor respuesta inmune o participar en la reparación de un tejido dañado. De igual manera sucede con el consumo excesivo de alcohol.
En este caso las células de defensa se ven afectadas, disminuyendo el número de linfocitos T y B periféricos, ambos relacionados con la defensa del cuerpo, reconocimiento y destrucción de organismos infecciosos como bacterias y virus.
Ejercicio
La elevación breve de la temperatura corporal durante e inmediatamente después del ejercicio impide el crecimiento bacteriano en los pulmones y las vías respiratorias, lo que reduce las probabilidades de contraer resfriado, gripe u otras enfermedades.
Además, el ejercicio provoca cambios en los anticuerpos y los glóbulos blancos que combaten las enfermedades. Estos anticuerpos circulan rápidamente, y detectan enfermedades con más rapidez de lo que podrían haberlo hecho antes. El ejercicio también disminuye la secreción de las hormonas del estrés. Un nivel alto de estrés incrementa las probabilidades de que se presente una enfermedad.
Hidratación
El agua es un medio de transporte de elementos importantes para la protección del cuerpo, como son los nutrientes, además de la eliminación de toxinas, lo que ayuda a la piel y a otros órganos a trabajar correctamente.
Entre sus principales ventajas está, ayudar a la eliminación del exceso de sodio en el organismo, regula la temperatura corporal, ayuda a que el cerebro funcione correctamente en estado de alerta, lo que no sucede con una deshidratación, con la cual se pierde la capacidad de concentración, procesamiento, mejora la digestión, a través de la disolución de los nutrientes, para que sean absorbidos con mayor facilidad y transportados hacia las células.
También mejora la salud y el aspecto de la piel, la cual es una barrera que protege de los patógenos externos, protege el corazón, se reduce las posibilidades de sufrir un ataque cardiaco, músculos y articulaciones más fuertes.
Consumo diario de vitaminas, minerales y probióticos
Los probióticos son bacterias que se encuentran en el intestino, contribuyendo a una fácil digestión y absorción de nutrientes y refuerzo del sistema inmunitario, sobre todo cuando éste atraviesa por situaciones donde las defensas se ven afectadas, como: gripes, resfríos, estrés, exceso de trabajo, dietas desequilibradas, cambios de estación, tercera edad, etc.
Con estas 5 claves, el sistema inmunológico estará correctamente estimulado para una excelente calidad de vida, libre de infecciones y enfermedades.
Fuente: Dr. Santiago Moral, Director Científico de Laboratorio Farmacéutico Lamosan.
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