La juventud es ese momento en el que vivimos todo con una vivacidad y energía desbordante. De ella tenemos mucho que aprender.
En una edad madura solemos escuchar la frase, “si tuviera tu edad con todo lo que sé ahora seria maravilloso” “si en tu edad yo hubiera tenido todas las oportunidades que tu tienes seria diferente”.
¿Pero qué sucede en la juventud temprana? Muchos de los “errores” que cometemos en esa edad hacen parte de la experiencia y aprendizaje, sin embargo, es valioso entender que cada paso puede tener una gran enseñanza y de esa manera construir un mejor mañana.
Errores que cometemos en la juventud
Algunos de los errores más cometidos en la juventud son:
No darle la verdadera importancia a la administración de las finanzas
Se suele pensar que existen padres proveedores y que el dinero estará ahí de forma indefinida. Por lo tanto, no se reconoce el esfuerzo de quien da el dinero. Para esto trabajar un poco y empezar a cubrir algunos gastos personales con pequeños ahorros puede desencadenar un sentido de responsabilidad por parte del joven, ya que lograría comprender el verdadero valor de lo que significa ganarse las cosas.
Pensar que todas las personas son sus amigos
En esta etapa es muy común abrir las puertas a todo tipo de personas y considerarlos amigos, lo cual desencadena un exceso de confianza y mas adelante una gran desilusión. Tras de esto el mensaje es reconocer que personas se permite ingresar a su vida, los amigos pueden ser muy pocos, pero aportan mucho, desde conversaciones productivas, momentos de esparcimiento, inspiración y redes de apoyo en situaciones difíciles
Creer que todo en la vida es fácil
Las experiencias aun no vividas crean un velo donde el joven siente que el trabajo de sus padres es sencillo y que las cosas se consiguen fácilmente, de ahí que no se empatice de forma adecuada cuando se escuchan las conversaciones de los padres. Incrementar la comunicación, por ejemplo contar cómo fue el día en el trabajo ayudará a los jóvenes a sentir más de cerca la experiencia de los padres y así darse cuenta que las cosas son más complejas de lo que parecen.
Pensar que la educación profesional no servirá de nada
Actualmente y con el incremento de emprendimientos son cada vez más los jóvenes que consideran que tener una profesión no tiene relación con el éxito en los emprendimientos y que por el contrario es una perdida tiempo y dinero.
Este mito se cae cuando realmente se comprende que el estudio, no solo da conocimiento, sino que incrementa la autoestima, favorece la socialización la resolución de conflictos y algo maravilloso, cuida el cerebro, cada día en la universidad puede ayudar a que el cerebro tenga nuevas conexiones sinápticas, y que se ejercite lo suficiente para desarrollar un pensamiento crítico y saludable. Así que formarse como profesional es un plus para lo laboral y personal.
Aprender
Para todo lo anteriormente descrito, algo que se debe tener siempre presente, son las consecuencias a largo plazo, así que hacerse preguntas como: ¿esto que estoy haciendo ahora que consecuencia tendrá en un mes o en un año? La respuesta facilitara abrir un poco la fantasía del momento.
Se puede tener una juventud grandiosa, donde exista la diversión y al mismo tiempo sacarle el provecho mas sano a todo este nivel de energía y la facilidad de centrarse en crear una vida mas saludable y plena para el futuro, y así cuando llegue la edad madura las bases estén listas para la construcción de una nueva historia.
Escrito por: Carol Obando, Directora Centro Internacional de PNL, Coaching y Psicología.
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