Jóvenes que inicialmente buscaban pasar el tiempo frente a una cámara, empezaron a recibir dinero por divertirse.
Iniciaré con lo obvio: vivimos rodeados -incluso diría dominados- por la tecnología. Nos acompaña cada minuto del día. Cuando llevamos en el bolsillo nuestro smartphone, o en el carro con un puerto auxiliar mientras manejamos; en la selfie que subimos a Instagram o en el video viral de esas tres chicas en un carro cantando los clásicos de las últimas décadas.
Todas estas acciones las hacemos de forma automática, en el día a día, sin recibir nada más que likes a cambio. Pero, hay algo más que podemos recibir de las redes sociales y la tecnología.
En el 2005, se creó una de las redes sociales más conocidas del mundo: YouTube. Su principal objetivo en aquel entonces era compartir videos de un evento al que habían asistido sus creadores con unos amigos de la universidad. Un año y medio después, en noviembre de 2006, Google compró Youtube en $1.650 millones y fue ahí cuando esta red social se convirtió en todo un éxito.
Mientras crecía la plataforma, crecían los youtubers -usuarios de YouTube- conocidos hoy como creadores de contenido. Es aquí cuando los más creativos deciden, sin darse cuenta, desplazar lentamente a la televisión como el único medio audiovisual que proporciona entretenimiento de buena calidad.
Jóvenes que inicialmente buscaban pasar el tiempo frente a una cámara empezaron a recibir dinero por divertirse. Lo que ganaban, lo invertían en mejores cámaras y luces, atrayendo más la atención de sus suscriptores que aumentaban cada minuto.
Hoy, ser youtuber significa ser un socio de YouTube, una celebridad, un creator, que significa tener un trabajo remunerado.
Como fanática de esta plataforma, he seguido de cerca la historia de muchos de estos creadores, que ahora, incluso, son una comunidad. Los invito a probar YouTube desde otra perspectiva, no solo como consumidores, sino como creadores, autores de nuevos estilos, de nuevas historias. Los invito a convertir YouTube en su negocio, ¿quién sabe? podrían convertirse en el siguiente Enchufe TV.
¿Quieres ser un ‘youtuber’?Inspírate en los que ya lo son. Te comparto algunos de los canales de YouTube más influyentes del 2014. VIAJES: JacksGap son relativamente nuevos en YouTube, pero han tenido gran acogida. Recorren el mundo y nos cuentan sus experiencias. Una guía de viajes, con un estilo National Geographic, que ya tiene casi 5 millones de seguidores. BELLEZA: Zoella comparte consejos de moda y belleza. Cómo vestir, cómo decorar interiores y como maquillar. Cuenta con más de 9 millones de seguidores. COCINA: The Kitchy Kitchen. Comparte consejos de cocina para principiantes y avanzados. Comida sana, postres, jugos, entre otras cosas. Tiene 56 mil seguidores. MÚSICA: Chester See. Música original y covers de los hits del momento. Uno de los que más colabora con otros youtubers para hacer música. Actualmente cuenta con más de un millón de seguidores. |
Por Michelle Cabanilla
Periodista
