Yo les propongo que hoy miremos a Cristo en la Cruz y lo contemplemos.
Hagamos silencio para que podamos escucharlo, para que sus palabras reconciliadoras entren en nuestro corazón. Meditemos en el significado de la cruz para nuestra vida y la importancia que le damos.
¿Por qué Jesús siendo Dios no escogió un camino menos doloroso, si pudo habernos salvado de otra manera? De todas las explicaciones que podemos dar al respecto, creo que la que mejor resume el sentido de este hecho es el Amor. Jesús tomó el camino de la cruz, por el gran amor que tiene por el hombre. Él quiso tomar sobre sus hombros el gran peso que tiene nuestro pecado, porque al asumir el sufrimiento se hacia solidario con el dolor que experimenta la humanidad. La lógica de su pedagogía es la humildad. ¡Qué gran muestra de misericordia de Dios Padre de regalarnos a su Hijo para que tengamos vida!. ¡Qué amor más grande el de Jesús al ofrecer su vida por cada uno de nosotros!
Por ello te ofrecemos varias frases que te pueden servir para meditar este Viernes Santo.
- Con la cruz Jesús ha abierto, de par en par, la puerta entre Dios y los hombres. – Benedicto XVI
- El que no busca la cruz de Cristo, no busca la gloria de Cristo. – San Juan de la Cruz
- La medida del poder llevar una cruz grande o pequeña, es el amor. – Santa Teresa de Ávila
- Cuando caminamos sin la cruz, cuando edificamos sin la cruz, y cuando confesamos un Cristo sin la cruz, no somos discípulos del señor.
- Fuera de la cruz no hay otra escalera por donde subir al cielo. – Santa Rosa de Lima.
- La cruz permanece firme mientras el mundo da vueltas. – Lema Cartujo.
- La cruz de Jesús es la palabra con la que Dios ha respondido al mal del mundo. – Papa Francisco.
- La cruz es la escuela del amor. – San Maximiliano Kolbe.
- No hay mejor leña para encender el fuego del amor divino que el santo madero de la cruz. – San Ignacio de Loyola.
- Dios tuvo en la tierra un hijo sin pecado, pero nunca uno sin sufrimiento. – San Agustín.
Aprendamos de Cristo y carguemos generosamente la Cruz. Así podremos ayudar también a otros a cargarla. Esta es la expresión más grande del amor que estamos llamados a vivir.
Vía: Catholic-Link