La canción de John Lennon, utilizada por Ecuador para su campaña turística promocional “All you need is Ecuador”, nos lleva a desarrollar algunas ideas.
Todo lo que necesitas es amor -como requisito indispensable- para ser feliz, cambiar el mundo y para hacerlo un lugar mejor para vivir. Todo es más fácil y alcanzable con este importante componente.
El documental “I Am”, de Tom Shadyac, también lo describe científicamente con base en observaciones y experimentos: entrevistas a líderes, científicos y filósofos. No hace otra cosa, que repetir lo reiterado por siglos, por diferentes religiones, por la sabiduría popular y las creencias de los pueblos ancestrales, pero que a la humanidad siempre le ha resultado muy difícil asimilar y practicar.
Las buenas acciones, la generosidad, amabilidad y cooperación están comprobadas, que además de hacer el bien a quien las recibe, hace igual o mayor beneficio a quienes las realizan o tienen esas buenas disposiciones. El refrán, repetido por generaciones, “compartir es el secreto de la felicidad”, es la mejor prueba de la anterior aseveración. Su eficacia funciona con grandes y pequeños, para enseñar a controlar las actitudes y tendencias egoístas.
Todas las especies, actúan cooperativamente, se ayudan unos a otros, se protegen a sí mismo, se preocupan por los más débiles o enfermos, incluso se ayudan a morir. No obstante, los más inteligentes de la creación, tenemos todavía mucho que aprender y lograr mejores resultados con nuestra propia civilización, para preservar y conservar nuestro hábitat, para el uso futuro de las siguientes generaciones.
Que es difícil cambiar la realidad, que la ignorancia o la pobreza no la podremos nunca erradicar. El océano es la suma de millones de millones de pequeñas gotas. El salvar una estrella de mar no va a cambiar la suerte de cientos de estrellas de mar que mueren en la orilla, pero si recoges una y la devuelves al mar, has cambiado la suerte de esa estrella de mar. Haz lo mismo por tu prójimo, por el que está más cerca de ti, hazlo cada día, a cada momento y comenzarás a cambiar el mundo, por lo menos alrededor de ti.
Por: Luis Villacres Smith
Ace-Uniapac