¿Arte y gastronomía o el arte de la gastronomía? En este análisis obtendremos la respuesta a esta interesante incógnita. ¡Lee y comparte!
Una de las artes más completas, que abarca todas las sensaciones y emociones a través de los sentidos, a los que complementa y conjuga de una forma muy especial, es la gastronomía.
Tuve la oportunidad de participar en el reality show «Master Chef Ecuador», en el que competí y llegué a estar entre los finalistas, habiéndome destacado de una forma muy original.
Tras esto, llegué a la conclusión de que fue mi sensible vinculación, como artista, con aquello que las emociones humanas pueden expresar a través del olfato, el gusto, la composición de colores, texturas, aromas, etc.; toda esta combinación de elementos fue un viaje introspectivo bastante enriquecedor.
Sensaciones y emociones
Ahora bien, es verdad que no siempre nos sentamos a analizar los alimentos que ingerimos, pero ¿alguna vez se han tomado el tiempo de analizar lo que comemos?, ¿qué tal les parece lo que ven?, ¿luce apetitoso?, ¿emula esculturas?, ¿o simplemente ven la comida como un medio de subsistencia?
Si bien cada persona vive una realidad particular, la comida puede hacer que emerjan diferentes sensaciones a partir de las experiencias, emociones, recuerdos, rasgos culturales y otros detalles guardados en el inconsciente. La misma persona podría sorprenderse de todo el cúmulo de posibilidades que pueden emanar a través de la comida.
Así, el aroma y el sabor pueden transportarnos y evocar vivencias personales de cualquier etapa de nuestras vidas, ya sea de la niñez o de momentos recientes. Estas vivencias nos permiten asociar nuestro sentido del gusto y situarlo, sincrónicamente, con sensaciones de rechazo, de apego o de cariño.
De hecho, los recuerdos de rechazo hacia ciertos alimentos —producto de la intolerancia o de una alergia— pueden permanecer enraizados en el inconsciente, debido al vínculo que tanto la mente como el cuerpo desarrollan a partir de una experiencia negativa. De hecho, resulta por momentos inverosímil cuánto y cómo estas experiencias pueden llegar a incidir en nuestras vidas con el paso del tiempo.
Todo está ligado al arte
Todos sabemos que los alimentos sanan, reconfortan y, sobre todo, generan sensaciones maravillosas en nuestro interior. Pero, también son generadores de energía, y no solo calórica, sino también de aquella que nos hace sentir, cual efecto placebo. Me refiero a la energía que emanamos al percibir las cosas con nuestros sentidos y a lo bien que puede hacernos sentir una buena comida.
Pero ¿por qué hablo de esta energía que nos hacen generar los alimentos? Resulta que, al final, todo se basa en eso; aquello que nos rodea, las conexiones, la naturaleza, los seres vivos, la coexistencia y el sentir se resumen en energía. Las sensaciones percibidas al ingerir una comida hacen que nuestro cuerpo emane dicha energía, la cual fortalece nuestro entorno y nos sitúa en la frecuencia adecuada.
Ahora bien, ¿por qué está todo esto tan ligado al arte? ¿Por qué constituye un arte en sí? Porque el arte es ubicuo y es un generador de pensamiento y de un sentir que han elevado al ser humano hasta el pináculo de la escala evolutiva. La gastronomía, por su parte, también contribuye en este sentido, puesto que, con todas aquellas sensaciones que evoca, acerca nuestra existencia hasta aquel tope sublime: el amor y la armonía.
Escrito por: Carla Bresciani, estudiante Escuela de Arte UEES.
-
Lee también sobre: Nutrición adecuada para mujeres lactantes.