Las lágrimas de esta historia se disipan con la sonrisa del bebé que sobrevivió mientras abraza a su hermanito.
La foto fue publicada ayer, pero no pasó mucho tiempo antes de que el mundo capturara la perfecta expresión del alma gemela de este angelito que solo acompañó a sus padres por un corto tiempo.
Los gemelos Mason y Hawk Buchmeyer de St. Lucie County, capturaron la atención del mundo en las redes sociales con la foto que muestra al bebé de casi dos semanas abrazando a su hermanito que nació con un problema de salud que le cobró su vida.
Se puede ver a Hawk conectado a un respirador artificial, mientras Mason lo abraza y sonríe. En solo unas horas la foto había coleccionado más de 100.000 me gusta y había sido compartido más de 26.000 veces en Facebook.
Los padres de los pequeños, en una reciente publicación, hicieron el anuncio más triste que un padre puede tener:
«Nuestros corazones están tristes esta mañana ya que nuestro pequeño hombrecito ha sido llamado a casa a estar con Jesús. Él se fue en paz y sabemos que él ya no está sufriendo. Por favor dennos algo de tiempo para pasar por este dolor y comenzar el proceso de sanar».
Hawk nació con una condición congénita a la que se la conoce como hernia en el diafragma.
De acuerdo a Health Line esta condición se produce cuando uno de los órganos abdominales se mueve hacia el pecho empujando y abriendo el diafragma. El pequeño Hawk tuvo que ser sometido a numerosas cirugías desde el momento en que nació debido a esta condición.
Los padres de los gemelos, Brandy Guettler y Tommy Buchmeyer han creado una cuenta en Facebook que está exclusivamente dedicada a los gemelos. Esta página fue creada por sus padres para mantener a la familia, amigos, y ahora, a los desconocidos que se preocupan por esta familia, informados acerca de los niños.
¿Cómo sobrellevar el dolor por la pérdida de alguien tan especial en la familia?
Por lo general el estado de perdida, sigue de una gran necesidad de aislarse, una necesidad de sentir ese dolor con toda la intensidad que este viene.
Muchos padres sienten enojo, bronca. Aceptar que un hijo se ha ido no es algo que nazca naturalmente en ningún padre del mundo; la bronca o la búsqueda de un culpable son sólo formas de supervivencia. Nuestra mente sólo está tratando de sobrevivir tanto dolor.
En muchos casos, los padres también experimentan el deseo de unirse a ese hijo que los ha dejado, y aunque es algo que nos asusta, es una emoción válida y normal en esta situación.
Lo que los expertos sugieren es que pase lo que pase, que estos padres luchen por mantener a la familia junta y unida. En lugar de aislarse, lo sano está en apoyarse y desplomarse en el soporte incondicional de la familia. Es importante tratar de entender que los demás miembros de la familia también están sintiendo un dolor inmenso por la pérdida.
Tener una creencia religiosa y apoyarse en esta también es muy recomendable
Vía Hacer Familia