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La administración efectiva de las finanzas no tiene límite de edad. Cuando nos convertimos en adultos mayores, el manejo del dinero sigue siendo importante, porque impactará en nuestra calidad de vida.

Muchos padres enseñan desde pequeños a sus hijos a administrar dinero de manera eficiente, ya sea con alcancías u otras herramientas. El tiempo corre, los hijos crecen y los padres llegan a una edad mayor; desde ahí comienzan a surgir los efectos del envejecimiento y se olvidan de cómo administrar su propio dinero.

La tercera edad puede llegar a ser una de las mejores etapas de vida, siempre que seamos conscientes de qué debemos planificar para ello.

La vejez puede hacer que resolver situaciones financieras se vuelvan un poco más complicadas de lo normal, debido a que, a medida que pasa el tiempo, el cerebro disminuye sus capacidades. El deterioro cognitivo puede tener un impacto negativo  sobre la capacidad de evaluar las finanzas y actuar de manera edecuada; por esta razón, normalmente, los hijos o las personas cercanas, pasan a convertirse en ayuda para ellos, administrando el dinero.

Es importante que este tipo de asunto se converse. Lo ideal es realizar una reunión familiar en donde suen pueda hablar formalmente sobre quién se va a encargar de llevar un registro, cómo se va a manejar el dinero, cuáles han sido las falencias, y qué se hará al respecto para solucionarlas.

De un número de 300 adultos mayores, el 32% reciben ingresos provenientes de la jubilación, lo que hace que reciban su ingreso propio; no todos ellos se encuentran en capacidad de manejar su ingreso, mientras que otros sí, por ello es importante tomar precauciones para efectuar un control y manejo adecuado.

 Anotemos los siguientes consejos

  1. Llevar un registro de sus ingresos y egresos de manera diaria, ayudará no solo a controlar sus desembolsos, sino a mantener ejercitada su mente.
  2. Clasificar los desembolsos que se efectúen categorizándolos: alimentación, cuidado de acompañante, medicinas, limpieza de hogar, paseos, etc…
  3. Con aquellos desembolsos fijos que se mantengan, debemos recurrir al manejo de pago automático, por medio de las entidades bancarias.
  4. Nombrar a un co-titular de cuenta bancaria, o representante legal que sea de absoluta confianza.

Nunca es tarde para aprender, quienes llegan a los últimos años de su actividad laboral y el retiro también deben considerar que el buen manejo de las finanzas personales contribuirá a mantener una óptima calidad de vida.

El adulto mayor debe mantener su independencia en el manejo financiero mientras le sea posible, sin embargo, los familiares deben velar por el buen uso de sus finanzas. El objetivo principal es lograr que todo se encuentre bien organizado. En general, se recomienda que todos  realicen un inventario de todas las cuentas corrientes, de inversión, certificados de depósito y de acciones, y bonos de información, y cualquier otra información financiera que sea relevante.

Por CPA Roxana Pulgarin Vallejo
Jefe Control de Gestión
Hogar del Corazón de Jesús de la Junta de Beneficencia de Guayaquil

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