¿Cómo puedo curar a mi hijo de la gripe?

Puede ser muy frustrante tener a nuestros pequeños enfermos, pero estos breves consejos nos ayudarán a hacer de la gripe algo más llevadero.

Los niños pueden beneficiarse de más descanso en la cama y beber muchos líquidos. Para el malestar y fiebre tu pediatra puede prescribir acetaminofén o ibuprofeno en las dosis recomendadas según la edad, peso.

A tomar en cuenta:

• Es importante saber que el ibuprofeno solo se recomienda a partir de los 6 meses de edad, y nunca se debe dar aspirina a un niño con gripe.
• Los antibióticos no curan la gripe, ni tienen efecto contra los virus.
• Si tu hijo fue detectado con Influenza, existen varias medicinas antivirales que se venden únicamente con receta médica y se deben administrar no más tarde de las 48 horas desde que iniciaron los síntomas.
• Para el alivio de la congestión, se puede usar gotas nasales de solución salina. Para los bebés, usa un succionador con pera de goma para extraer las secreciones. Puedes colocar un humidificador de vapor frío (también conocido como vaporizador) en la habitación de tu hijo para ayudar a mantener las secreciones nasales más húmedas y permitir que su hijo puede respirar mejor. Este vaporizador debe contener únicamente agua. Evita los vaporizadores de agua caliente ya que pueden producir quemaduras.
• Existe evidencia científica del consumo de miel de abeja cuando un niño presenta una gripe. Puedes intentar con pequeñas cucharaditas o usar pastillas para la tos a partir de los 4 años. Nunca dar miel a un niño menor de un año ya que puede tener consecuencias fatales. En cuanto a los ungüentos mentolados, se puede frotar sobre el pecho o la parte delantera del cuello. El calor del cuerpo ayudará a que el medicamento se disipe poco a poco en el aire y el niño respire este aire que le ayudará para dormir y no toser. Asegúrate que el frasco con mentol esté fuera del alcance de los niños. Debes siempre tener cuidado con los medicamentos de vena libre para la tos y gripe ya que pueden ser peligrosos.

¿Cuánto tiempo debo permanecer en casa si estoy enfermo?

Lo recomendable es al menos 24 horas después de que la fiebre haya desaparecido. Existen ciertas señales de advertencia que nos pueden indicar que hay un empeoramiento de la enfermedad, entre las que están: respiración acelerada o dificultad para respirar, coloración azulada de la piel, llorar sin lágrimas, cantidad significativa menor de pañales mojados, dificultad para despertarse, fiebre con sarpullido, dificultad para comer; si cualquiera de estos síntomas se presentan se debe acudir inmediatamente al médico.Es nuestra responsabilidad como padres ayudar a que nuestros pequeños se sientan bien cuando están enfermos. Una buena dosis de paciencia y de buen ánimo para una recuperación rápida.

Por Carolina Salvador
Médico pediatra
@PediatricsUIO