Si eres una mamá joven, tienes la gran oportunidad de formar una familia fuerte y unida, un lugar donde tus hijos sepan que siempre serán amados y bienvenidos.
Nacer en el seno de una familia es una bendición, ya que contar con un padre, una madre, hermanos, primos o abuelos, es algo que desafortunadamente no todos podemos tener. Sin embargo, sin importar las circunstancias de nuestra vida, tenemos la oportunidad de formar una familia con quienes tenemos a nuestro alrededor.
Si bien las familias vienen en tamaños y formas diferentes, con muchos o pocos integrantes, lo más importante de contar con una es saber que perteneces a un grupo de personas que te aman y te aceptan tal y como eres.
Tu familia es algo así como el equipo al que perteneces en un programa de concursos en la televisión, donde tú eres quien debe responder la última pregunta que les hará ganar un gran tesoro. A pesar de que no sepas la respuesta, ellos te seguirán animando y divirtiéndose mucho al jugar en equipo. Pongo este ejemplo, para señalar la importancia que tiene que nuestros hijos tengan la certeza de que forman parte de una familia que los ama, ya que los niños que saben y sienten esto, son niños más seguros de sí mismos, tienen mejor aprovechamiento escolar, son más sanos y son felices. ¿Te gustaría desarrollar este sentimiento en tus pequeños? Aquí hay algunas ideas para que lo logres:
Enaltece su nombre familiar, su historia y sus antepasados
Cuéntales a tus hijos sobre sus abuelos y otros antepasados, de las cosas buenas que hicieron y de cómo sus esfuerzos han hecho posible que hoy ellos tengan tantas cosas buenas. Crea con ellos un árbol familiar donde puedan verse a sí mismos como parte de una gran familia. Platícales por qué elegiste el nombre que llevan y fomenta el gusto y orgullo por los apellidos que han heredado. Siempre habla de tu familia como ese gran equipo que les apoya y se esfuerza por ellos.
Anímales a participar en equipos deportivos, grupos de arte y actividades que impliquen la colaboración
En la infancia, el trabajo en equipo es básico para desarrollar valores como la solidaridad, el sacrificio personal y el esfuerzo colectivo para lograr un bien común. Cuando los hijos son únicos y no tienen hermanos o primos, pertenecer a un grupo de iguales les ayuda a ubicarse y entender que el mundo no gira en torno de ellos solamente.
Crea tradiciones familiares significativas
Celebrar los cumpleaños, tener una canción especial que cante toda la familia o inventar una palabra secreta puedan ser actividades que fortalezcan los lazos familiares y la certeza de pertenecer a ella. También podrían elegir una señal que signifique «te quiero», cocinar juntos algún platillo que a todos les guste o tener reuniones anuales que le den sentido a la familia. Mi padre solía silbarnos de una manera muy particular, si estábamos en un lugar público, con sólo escuchar aquel sonido sabíamos que se trataba de papá y corríamos a su encuentro, ya que sabíamos que ahí era nuestro lugar y nos sentíamos seguros.
Diseñen juntos un escudo familiar
Todos los súper héroes tienen un escudo, un lugar secreto, algún anillo o saludo clave, por lo que esta actividad les encanta a los niños y, cuando sean mayores, la valorarán aún más. Diseñen juntos una bandera, un estandarte o algo que les recuerde a su familia. En mi casa, todas las mujeres usamos el mismo anillo: copias del anillo original de mi abuela. Ahora, conforme mis hijas se van acercando a los 21 años, un nuevo anillo familiar les es entregado. Me emociono sólo de pensar que una nieta mía reciba un anillo familiar también.
Mi hija mayor vivió algunos años sola en un país muy lejano de casa y según me ha contado, cuando se sentía sola o que las cosas no funcionaban tan bien como ella lo esperaba, se consolaba mucho pensando en las cosas que solíamos hacer cuando ella estaba en casa. Veía su anillo familiar y sabía que en algún lugar, a miles de kilómetros de distancia, había alguien pensando en ella y un lugar al que pertenecía para siempre: su hogar.
Vía Familias.com