¿Cómo saber si tu bebé está sano en el vientre? Es la pregunta que a toda embarazada y familiares les produce un gran estrés.
La espera puede ser corta o larga; natural, o con la ayuda de un tratamiento de fertilidad. Sorpresiva o intensamente ansiada. Un nuevo camino empieza para la pareja, cuando el laboratorio confirma el primer aviso de una prueba de farmacia hecha en casa.
En la consulta médica se escucha un ‘sí, usted está embarazada’. Con la noticia inicial vienen los cuidados del embarazo. Desde la introducción de la ecografía por ultrasonido hacia los años 60, se dio un nuevo giro al monitoreo de la salud fetal. Muchas embarazadas de esa época – ahora abuelas – comenzaron a usarla con recelo, y hasta preferían que el sexo del bebé se recibiera con sorpresa.
En la actualidad, el ultrasonido es uno de los estudios rutinarios y junto a ellos se está implementando exitosamente una herramienta que lo complementa: los estudios genómicos perinatales. Aunque la gran mayoría de embarazadas obtiene en sus ecografías y exámenes parámetros normales, este no siempre es el caso.
La edad materna, antecedentes genéticos, y exposición ambiental se asocian a embarazos anómalos. Aquí es cuando entran los estudios genómicos, que hacen posible complementar y contrastar estos estudios de rutina a través de análisis del ADN fetal.
Tranquilidad al saber que el bebé crece bien en el vientre
Discutir, decidir y orientar a la paciente sobre cuál es la prueba que se ajusta mejor a su caso, es un acto que requiere de profesionalismo y empatía. ‘¿Está bien mi bebé?’ Es la pregunta más frecuente en una mujer embarazada. El síndrome de Down, síndrome de Turner, atrofia muscular espinal, y cientos de enfermedades genéticas pueden detectarse tempranamente en el embarazo.
Contrario a la usanza del pasado, en que más allá de atestiguar los movimientos fetales primaba al nacimiento el factor sorpresa, las futuras madres buscan hoy saber con exactitud cuáles son las razones de un embarazo en problemas. Tener la tranquilidad de traer un niño sano y prepararse para la llegada del nuevo hijo con asesoría, es una herramienta útil para cuidar la salud emocional y mejorar la calidad de vida.
Fuente: Genostics.
-
Lee también sobre: Nutrición en la gestación y los primeros tres años del niño.
