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Uno de los puntos claves para lograr un verdadero empoderamiento femenino en las empresas, es el buen manejo de la lactancia materna.

Uno de los desafíos más importantes que enfrentan las mujeres al convertirse en madres es lograr un equilibrio entre su vida laboral y familiar, especialmente durante los primeros meses, cuando deben amamantar a sus bebés y al mismo tiempo retomar sus labores diarias en el trabajo. En algunos casos, gracias a la legislación ecuatoriana las madres optan por tomar una pausa laboral para enfocarse en su nuevo rol, dedicar más tiempo a la lactancia materna y brindar un cuidado pleno a sus pequeños. Sin embargo, para aquellas
que desean reincorporarse a su vida laboral, esta transición puede convertirse en una fuente de estrés si no se gestiona adecuadamente.

Muchas empresas en el país han dado un paso al frente en la promoción de la lactancia materna mediante la implementación de políticas inclusivas y la creación de lactarios especiales para que las madres se sientan cómodas y disfruten de un ambiente relajado al extraer su leche. Una de las empresas líderes en este aspecto es FEMSA Salud – GPF, que recibió la distinción de «Empresa Amiga de la Lactancia Materna» por el Ministerio de Salud Pública en 2018. Hasta la fecha, la empresa ha instalado 130 lactarios en sus oficinas y Puntos de Venta a nivel nacional, brindando espacios acogedores y adecuados para sus más de 50 colaboradoras, quienes actualmente viven esta etapa.

Además, la compañía promueve iniciativas que proporcionan mayor comodidad a las madres en periodo de lactancia. Ofrece flexibilidad a las colaboradoras para que tomen descansos para amamantar o extraer leche durante su trabajo, sin afectar negativamente sus responsabilidades laborales.

 

 

Recomendaciones para el adecuado manejo de la lactancia materna

La doctora Erika Hernández, médico ocupacional de la compañía, recomienda una estrategia de lactancia diferida como una solución para las madres trabajadoras. Esta práctica implica recolectar la leche materna durante ciertos momentos de la jornada laboral y almacenarla en recipientes adecuados, manteniendo la cadena de frío para posteriormente darle la leche al bebé en biberón.

Para llevar a cabo este proceso de manera efectiva, es fundamental que la madre esté atenta a los momentos en los que produce más leche y aproveche los tiempos destinados para la extracción de leche en los lactarios, espacios especialmente diseñados para este propósito.

La doctora. también enfatiza la importancia de la paciencia durante este proceso, porque el bebé puede enfrentar cierta dificultad en la adaptación a la nueva forma de alimentación. Sin embargo, con el tiempo y el apoyo adecuado, ambos se acostumbrarán y lograrán una transición exitosa.

Además de estas recomendaciones, Hernández destaca que es fundamental que la madre organice sus tiempos y cuente con un lugar de trabajo que le brinde todos los beneficios necesarios para llevar adelante la lactancia diferida. El apoyo de las empresas en este sentido no solo es valioso para las madres trabajadoras, sino que, también resulta de provecho para los empleadores.

Finalmente, si la madre decide conciliar el trabajo con la lactancia materna mediante esta estrategia, logrará proporcionar una alimentación adecuada para su pequeño/a, reflejándose en un óptimo crecimiento y desarrollo, favoreciendo al bienestar de la familia y el éxito de la compañía.

 

 

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