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¿Por qué debo cuidar de mí? El auto cuidado reduce el estrés, el sentirse abrumado, fatigado y con resentimiento.

La vida está llena de cosas lindas. Muchas de ellas capturan nuestra atención y nos entusiasma, y eso está muy bien. Admirar el esplendor de lo que nos rodea nos ayuda a vivir en el presente. Sin embargo, esa mirada suele irse tanto hacia afuera que nos aleja de nosotros mismos.

Hablar de amor propio es un tema muy amplio y a veces, suele reducirse a vernos bien o que nos agrade lo que vemos en el espejo. Realmente el amor propio va mucho más allá. Implica conectarnos con nosotros mismos y entender que cada esencia es individual y ya es perfecta en todo su esplendor.

Amarnos implica aprender a poner límites, decir que No cuando sea necesario, reconocer todo lo que nos ha llevado a obtener logros y superar obstáculos, hacer las paces con nuestro espejo y aprender a vernos con nuestros propios ojos, no con la mirada de quien nos hirió ni con los comentarios que marcaron nuestra memoria.

Para establecer un adecuado autocuidado es importante responsabilizarnos de nosotros mismos. Nadie más hará por nosotros lo que es necesario para estar bien. Estos pasos deben darse sin prisa y sin pausa, respetando el proceso individual y reconociendo el esfuerzo en cada pisada.

Si tienes un objeto valioso, seguramente lo apreciarás mucho, tendrás cuidado de ponerlo en un lugar seguro, la superficie donde lo pones debe estar limpia y tendrás mucha cautela al exponerlo al exterior. Ahora, mírate a ti ¿Qué pasaría si te consideras alguien valioso?

 

 

Lo beneficioso de cuidar de mí

Si decides cuidar de ti mismo lograrías:

  • Cuidarías tu cuerpo, tal vez te moverías más, dejarías un espacio al día para liberar el estrés, te alimentarias de forma saludable sin excesos en limitaciones y prohibiciones.
  • Respetarías tu Sí y dirías No a aquello que no puedes hacer en ese momento. Cerrarías ciclos con personas que en lugar de sumarte te restan energía. En este punto, no se trata de tener una coraza, sino más bien de respetar el proceso de los demás, tener claro hasta dónde puede llegar tu luz y permitirle al otro encender la suya.
  • Admirarías lo fascinante de la naturaleza y conectarías con ella cada día.
  • Te pondrías metas y darías pequeños pasos.
  • NO te dejarías para después.
  • Darías ese plus para cumplirte a ti.
  • Conectarías con quienes amas.
  • Tendrías esa conversación pendiente.
  • Te centrarías más en lo que tienes y en lo que si has logrado que en lo que no.
  • Jamás te compararías con alguien porque reconocerías que cada persona es distinta y que cada proceso también lo es.
  • Tendrías más espacio para divertirte.
  • Te atreverías a mostrar tus talentos.
  • Intentarías levantarte cuantas veces sean necesarias.
  • Tu pasado no determinaría quién eres y estarías dispuesto a crear de la nada memorias hermosas.
  • Elegirías personas valiosas en tu camino.
  • Experimentarías la diferencia entre vivir y sobrevivir.
  • ¿Porque punto te gustaría empezar? ¿Estás listo para cuidarte de verdad?

 

 

Escrito por: Carol Obando, Directora Centro Internacional de PNL, Coaching y Psicología.

 

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