A los estudiantes no se los puede tratar igual, porque cada uno tiene necesidades de aprendizaje diferentes. Hay que darle a cada uno lo que necesita.
Con el paso del tiempo y el cambio de las generaciones, se hace cada vez más evidente que los niños son muy diversos. En casa, incluso entre hermanos, ninguno reacciona igual al otro, actúa igual al otro y aprende igual al otro. Mucho más en una unidad educativa, donde al tener 100 o 1000 estudiantes estamos frente a 100 o 1000 historias familiares diferentes, estilos de aprendizaje diferentes y necesidades educativas diferentes.
Es por esto, que hoy las escuelas, además de ser inclusivas por ley, se abren al trabajo interdisciplinario para poder, junto a las familias, formar a los chicos de manera integral y darle a cada uno lo que necesita.
Dar lo que cada uno necesita
El querer dar a cada uno lo que necesita, sin duda, ha sido un gran apoyo en la inclusión de los chicos con necesidades educativas especiales, quienes cada vez más se van integrando a la educación regular, ya sea junto al acompañamiento constante de un maestro sombra, o de manera autónoma, apoyados solo por el seguimiento del DECE y las terapias de profesionales externos.
Es importante recalcar que cuando hablamos de interdisciplinariedad, es algo que se aplica con todos los niños, porque nos referimos no sólo a los beneficios que puede traer trabajar de forma coordinada con psicólogos, psicopedagogos y terapeutas ocupacionales, sino que es muy importante trabajar coordinadamente entre disciplinas, para no dejar de lado el potenciar en nuestros estudiantes otras áreas de su desarrollo más allá de lo cognitivo, y así lograr una verdadera formación integral.
Oportunidades
Es una hermosa oportunidad para las unidades educativas, responder a esta demanda y acercar al estudiante a experiencias artísticas (musicales, estéticas, etc.), experiencias deportivas, comunicativas y sociales, experiencias con la tecnología, que le permitan a nuestros chicos desarrollarse armónicamente en todas las áreas y, sobre todo les den la oportunidad de descubrir sus talentos y desarrollarlos hasta ser la mejor versión de sí mismos.
Escrito por: Inés Cobo de Gilbert, Directora Ejecutiva del Sir Thomas More.
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