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La conducta repetitiva de cortarse en diferentes partes del cuerpo, es un síntoma de que algo está pasando y requiere ayuda profesional.

 

Cuando se habla de cualquier conducta auto lesiva, podemos escuchar voces a nuestro alrededor que nos hacen pensar que todo esto se realiza para llamar la atención.  Se piensa que el adolescente está buscando identificarse con un grupo; o por el contrario, quiere ganar más observadores. Y bajo esta interpretación de la problemática, los padres empiezan a responder ante estos cortes, con el mismo autoritarismo como si se tratara de corregir cualquier conducta negativa.

¿Qué es el cutting? ¿Por qué hay cada vez más adolescentes que se realizan cortes en diferentes partes del cuerpo? ¿Cómo podemos darnos cuenta de ello? ¿Cuándo es una llamada de atención y cuando es un problema emocional severo?

Se conoce como cutting a la conducta repetitiva de cortarse en diferentes partes del cuerpo, es un síntoma que pudiera señalar la presencia de una depresión o dificultad emocional en los adolescentes. El chico(a) que se autolesiona busca reemplazar el dolor emocional a través del dolor físico. Es decir, al cortarse perciben que el sufrimiento emocional desaparece momentáneamente, y es por esto que llega a darse de manera repetitiva.

Cuando el adolescente tiene cicatrices de cortadas y busca enseñarlas, se podría pensar que lo hace como un efecto de buscar atención del medio; sin embargo, estos son muy pocos. La mayoría de las personas que llegan a autolesionarse buscarán esconder estas marcas porque sienten vergüenza y una culpa muy intensa por tenerlas; por lo tanto, usarán siempre pantalones o camisetas manga larga, o chompas para cubrirlas y de esta manera no ponerse en evidencia.

El cutting es solo un signo evidente de que hay un sufrimiento emocional, algún trauma vivido que no ha sido resuelto, o una situación compleja que no la está pudiendo sobrellevar.  Por lo tanto, el trabajo no se quedará solo en parar los cortes, sino ayudar a que este adolescente pueda verbalizar lo que le está molestando, lo que lo mantiene triste o ansioso. Debemos recordar que, en muchas ocasiones, lo que los adultos observamos es solo la punta del iceberg; pero, es justamente lo que hay detrás de ese comportamiento lo nos debería interesar llegar.

 

Características quienes se hacen cutting

Podemos detallar algunas características comunes en los chicos que han mostrado esta conducta:

Tienen una pobre valoración personal.

Son dependientes de la aprobación de los demás.

Tienen dificultad en su comunicación emocional.

Muestran déficit en sus habilidades para resolver problemas y adaptarse ante situaciones complejas.

Se irritan con facilidad.

Tienen pensamientos negativistas y catastróficos.

Si vives esto en casa o conoces de alguien que esté autolesionándose, no dudes en buscar la ayuda inmediata de un profesional que los direccione a ustedes como padres y al chico para que pueda salir de esta crisis. En muchas ocasiones, nos sentimos autosuficientes, pero al llegar a este punto, se requiere de una guía especializada en el tema.

 

PREVENCIÓN: buen manejo emocional del adolescente

Como todo en la vida, siempre es mejor prevenir que lamentar, a continuación dejaremos unas recomendaciones claves en el manejo emocional de un adolescente, esto los ayudará a identificar problemas antes de que lleguen a consecuencias difíciles de manejar, como lo es el cutting:

 

  • Asegúrate de que tu hijo(a) sepa y esté convencido que tu amor hacia él es incondicional, es decir que el mensaje de amor haya llegado hacia su cabeza y corazón.
  • Evita las críticas y etiquetas, esto cierra los canales de comunicación y hará que tus hijos no quieran confiarles a ustedes lo que piensa y siente.
  • Aprovechen el tiempo juntos compartiendo experiencias u actividades, mientras existan más de estos momentos podrás estar en mayor sintonía con la vida de tu hijo.
  • Cuando debas enseñar algo o ayudar a que tu hijo reflexione en alguna idea o conducta será recomendable utilizar preguntas en lugar de afirmaciones: “¿Cómo te sentiste con esa decisión que tomaste?”, “¿cómo se han sentido los demás o este amigo con esto que ha sucedido”. “Si pudieras cambiar algo de lo que hiciste, ¿cómo lo intentarías en esta nueva oportunidad?”. En la adolescencia es más beneficioso ayudarlos a razonar y brindarles oportunidad de acción.

 

 

Psic. Daniella Medina
Entrenadora Certificada en Disciplina Positiva
Directora Regional del Departamento de Psicología y Familia del IMF

 

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