Hay que estar prevenidos ante la enfermedad renal crónica. Conoce sus síntomas y las medidas de prevención. ¡Lee y comparte!
Un estimado de 17.000 personas en Ecuador están viviendo con enfermedad renal crónica o se encuentran en tratamiento sustitutivo renal, sea hemodiálisis o peritoneal, según datos del MSP.
El término “enfermedad renal crónica” quiere decir que hay un daño a los riñones que empeora lentamente durante meses o años. Los riñones filtran los desechos que producimos en nuestro cuerpo y eliminan el exceso de líquido de la sangre. Cuando fallan los riñones, estos desechos se acumulan.
Identificar la enfermedad
En la enfermedad renal crónica los síntomas son de aparición lenta y progresiva, algunas personas no presentan síntomas en absoluto y son diagnosticadas por un análisis de laboratorio en muchas ocasiones en etapas muy avanzadas de la enfermedad.
Identificar la enfermedad renal puede ser un gran desafío, tanto para el paciente como para las personas que lo rodean. Su diagnóstico y tratamiento especialmente en las etapas avanzadas, impacta severamente en sus vidas, en la de sus familiares y amigos para participar en actividades cotidianas como el trabajo, viajar y socializar; además, causa numerosos efectos secundarios, como fatiga, dolor, depresión, deterioro cognitivo, problemas gastrointestinales y problemas para dormir.
Los medicamentos y la dieta pueden ayudar a controlar los síntomas y frenar el avance del deterioro de la función renal. En las etapas posteriores, donde la enfermedad ha llegado a su etapa final, es necesario filtrar la sangre a través de un tratamiento que sustituya la función del riñón (diálisis) o hacer un trasplante.
Según datos internacionales, cerca del 10% de la población mundial padece enfermedad renal crónica, más de 2 millones de personas reciben tratamiento de diálisis o se encuentran realizando un trasplante de riñón, en nuestro país, según el Ministerio de Salud Pública, para el año 2020, existían cerca de 17500 personas en tratamiento de diálisis (hemodiálisis o diálisis peritoneal); pese a todo esto se puede afirmar que muchas más personas necesitan tratamiento, pero no lo reciben.
Estar motivados
Para que los pacientes tengan una actitud más positiva, estén más comprometidos y apegados a su tratamiento y, por lo tanto, mejoren los resultados clínicos, deben sentir que sus síntomas se manejan de manera efectiva y estar íntimamente motivados para convertirse en participantes activos en su tratamiento. Deben saber que es fundamental para el éxito de su tratamiento, que ellos son responsables del mismo.
El garantizar la participación en la vida es igualmente importante tanto para los pacientes como para las personas a cargo de su cuidado, en el lugar de sentirse consumidos y forzados por el enfoque actual para tratar la enfermedad renal.
¿Qué pueden hacer por sus riñones?
Se aconseja a los pacientes con insuficiencia renal, cumplir con su tratamiento y las indicaciones médicas a cabalidad para mantener una buena calidad de vida y que puedan desarrollar sus actividades con normalidad, para ello se debe aplicar las 8 reglas de oro para la salud renal:
- Mantenerse activo y en forma.
- Mantener un control regular de los niveles de glucosa (azúcar) en la sangre.
- Monitorear su presión arterial.
- Comer saludablemente y mantener su peso bajo control.
- Mantener una ingesta saludable de líquidos.
- No fumar.
- No automedicarse.
- Monitorear su función renal al menos una vez al año, sobre todo si tiene algún factor de riesgo, como por ejemplo: diabetes, hipertensión arterial y obesidad.
Fuente: Paola Fernández Daza, médico de Fresenius Medical Care Ecuador S.A.
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