¿Cómo elegir mi método de planificación familiar? Te invitamos a conocer varios de los métodos más empleados.
Elegir un método de planificación familiar natural (PFN) adecuado depende de varios factores, tanto personales como de salud. La decisión se basa en las necesidades de la pareja, su estilo de vida, la capacidad de seguimiento y, si existe alguna condición médica o particularidad en el ciclo de la mujer. Aquí te doy algunas pautas para ayudarte a elegir el más adecuado.
Objetivo principal: buscar embarazo
Si tu prioridad es evitar el embarazo de forma natural, es importante elegir un método que tenga una alta tasa de eficacia y que sea fácil de seguir a largo plazo. Si deseas concebir, algunos, como el Creighton o el sintotérmico, permiten identificar con precisión los días fértiles y optimizar el momento adecuado para intentar quedar embarazada.
Nivel de comodidad con la observación de signos físicos
Los métodos Creighton y Billings se basan exclusivamente en la observación del moco cervical. Si te sientes cómoda revisando este signo diariamente y llevas bien el registro, esta puede ser una buena opción.
Si te interesa monitorear más de un signo, el sintotérmico es ideal porque combina la observación de la temperatura basal (una medición fácil con un termómetro) junto con el moco cervical. Sin embargo, implica medir la temperatura todos los días a la misma hora.
Este método, también, puede incluir la observación del cuello uterino. Posee, entonces, un tercer indicador. No obstante, no todas las mujeres se sienten cómodas con este tipo de autoexamen.
Regularidad del ciclo menstrual
Si tienes un ciclo menstrual regular, muchos métodos de PFN serán efectivos, ya que el patrón de fertilidad es más predecible. Algunos, como el método del ritmo (calendario) o el Billings (moco cervical) podrían funcionar bien en este caso. Si tus ciclos son irregulares, es mejor optar por aquellos que combinen varios signos, como el sintotérmico o el Creighton. Pueden ser más precisos al identificar el período fértil porque no se basan solo en la duración del ciclo.
Nivel de compromiso y tiempo disponible
Si puedes dedicar tiempo diariamente para llevar un registro detallado, el Creighton o el sintotérmico son ideales, porque requieren observaciones diarias y un seguimiento constante.
Si tienes un estilo de vida más ajetreado o no puedes dedicar tanto tiempo al seguimiento, podrías considerar el Billings, que solo se basa en la observación del moco cervical, sin necesidad de medir la temperatura basal o realizar otros registros.
Acceso a instrucción y soporte
Algunos métodos requieren formación específica por parte de un instructor capacitado, como el Creighton. Si tienes acceso a instructores de estos métodos, puede ser una gran ventaja, especialmente si quieres aprender a interpretarlos con precisión.
Otros, como el sintotérmico, pueden ser aprendidos mediante libros o cursos en línea y no requieren necesariamente un instructor especializado, aunque puede ser útil contar con uno al inicio.
Condiciones de salud reproductiva
Si sospechas de problemas de fertilidad, como irregularidades hormonales, síndrome de ovario poliquístico (SOP), o endometriosis, el Creighton es una excelente opción, ya que está vinculado a la NaProTechnology, que puede ayudarte a identificar y tratar problemas de salud reproductiva.
Los periodos de Posparto, lactancia o premenopausia suelen causar irregularidades en el ciclo menstrual, lo que puede hacer más difícil usar métodos basados en un solo signo. El método sintotérmico es muy recomendado en estos casos, ya que combina varios biomarcadores y se adapta mejor a los ciclos impredecibles.
Preferencias religiosas o éticas
Si tienes valores religiosos o éticos que te inclinan hacia la planificación familiar natural, tanto el método Creighton como el Billings o el sintotérmico cumplen con los requisitos de la planificación natural de acuerdo con las enseñanzas de la Iglesia Católica y otras corrientes que promueven métodos naturales.
Eficacia y precisión
La eficacia de los métodos de PFN varía según el compromiso y la correcta aplicación. En general, el Creighton y el sintotérmico tienen una alta tasa de eficacia cuando se usan correctamente, alcanzando un 95-99% de eficacia para evitar embarazos.
Los más simples, como el método del ritmo (o calendario), son menos precisos y pueden tener tasas de error más altas, especialmente en mujeres con ciclos irregulares.
Comparación de métodos populares
Condiciones personales y estilo de vida
¿Eres una persona meticulosa y organizada? Los métodos Creighton y sintotérmico requieren registros detallados, pueden ser adecuados. ¿Prefieres algo más sencillo? El método Billings puede ser más fácil de seguir porque solo necesitas observar un biomarcador.
Apoyo de la pareja
Es importante considerar el nivel de implicación de tu pareja. Algunos métodos, como el sintotérmico, requieren abstinencia en ciertos periodos, por lo que la comunicación y la disposición de ambos es clave para su éxito.
La elección del método de planificación familiar natural dependerá de tus necesidades, nivel de compromiso, situación de salud y preferencias personales. Si buscas precisión y flexibilidad, el método sintotérmico puede ser una excelente opción. Si prefieres un enfoque muy detallado y vinculado a la salud reproductiva, el método Creighton puede ser más adecuado.
Escrito por: Ana María Ramírez, vía amafuerte.com
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