Cuidar el lugar donde los chicos hacen la tarea en casa los ayudará en su desempeño.
Como padres nos hemos preparado mucho para iniciar este año escolar, desde los trámites administrativos en el colegio hasta la compra de cada libro y útiles necesarios para nuestros hijos. Hoy, ya están en clases y depende de ellos poner atención, aprender y aprovecharlo al máximo.
Sin embargo, a nosotros nos queda una tarea más: preparar el espacio en casa para que nuestros chicos hagan sus tareas.
Supervisa
Para los más chiquitos, lo más práctico en sentarlos junto a nosotros en una mesa e ir supervisando el desarrollo de las tareas. Teniendo en cuenta que hasta los 8 o 9 años los chicos nos necesitan junto a ellos. Debemos acompañarlos y motivarlos a que se esfuercen por hacer una buena letra y mantener una adecuada presentación, además de cumplir con la tarea.
Los chicos más grandes, que hacen sus tareas solos, pueden caer en la tentación de “encerrarse” en su cuarto para hacer los deberes. Si bien la habitación, no es necesariamente un mal lugar para hacer las tareas, sí puede tener muchas distracciones. La principal es la cama: nuestros hijos vienen de estudiar 7 horas, probablemente de hacer deporte un par de horas más y a la hora de hacer deberes suelen estar cansados. Sin necesidad de sobre exigirlos, hay que darles un momento para que se bañen, coman, se distraigan un rato y motivarlos a hacer los deberes sentados. Si tienen la oportunidad de hacer una siesta esto podría perturbar su patrón de sueño en la noche. Además de convertirse en un círculo vicioso de más cansancio al día siguiente, que trae consecuencias negativas para su crecimiento.
Organízate
Teniendo en cuenta estas recomendaciones, el espacio adecuado bien puede ser la mesa del comedor, la sala de estar o el cuarto de estudio; lo importante es que este espacio quede marcado como su espacio de estudio.
Aquí deberá estar todo lo que necesite: cartuchera completa (plumas, lápices, lápices de colores, borrador, sacapuntas, tijeras, goma, etc.), libros de consulta como diccionarios y cualquier material específico que se requiera (computadora, calculadora, compás, etc.).
Se recomienda también que en este espacio predominen los colores fríos como el azul o el verde que trasmiten tranquilidad y facilitan la concentración. Ayuda mucho a organizarse, instalar un corcho o una pizarra pequeña, donde ellos puedan visualizar las tareas que tienen que cumplir y las actividades que tienen pendientes.
Y lo más importante, tratar que este espacio tenga la menor cantidad de distracciones posibles para nuestros hijos. Hoy en todas las áreas de su vida, la mayor distracción que existe son los dispositivos electrónicos. Los celulares, ipods, consolas de juegos entre otros, no deben estar presenten en el área de estudio. No importa que estos sirvan como calculadora, diccionario o cualquier otra herramienta que parezca útil, de todas formas implicará una enorme tentación para nuestros hijos y pueden perjudicar su aprendizaje.
Adicional a esto deben saber que el espacio de estudios ideal tiene que ser:
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Por: Inés Cobo de Gilbert
Psicóloga
Directora Ejecutiva Sir Thomas Moore