Dr. Jokin de Irala
Catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública
www.joveneshoy.org
Algunas personas utilizan el término pre-embrión para diferenciar al embrión antes y después de su anidación en el útero. La idea es dar a entender que sobre el supuesto “pre-embrión” se pueden hacer ciertos experimentos que sobre el embrión no.
Recuerda que inmediatamente después de finalizar la fecundación (penetración del espermatozoide en el óvulo) comienza la vida de un nuevo ser humano. A partir de ahí, el embrión va a ir creciendo continuamente y trasladándose por la trompa de su madre hacia el útero. Sobre el quinto día el embrión llega al útero, y aproximadamente un día después comenzará a penetrar en el espesor del endometrio donde anidará. La anidación terminará aproximadamente a los 14 días de la fecundación.
Por tanto, el término “pre-embrión” no tiene fundamento biológico, ya que el desarrollo de un ser humano es un continuo. Un estudio reciente encontró que no existe en la literatura científica ni una sola referencia que justificara la existencia del término preembrión. Su introducción es de origen jurídico y se hace con el objetivo de permitir legalmente la utilización de embriones humanos en la experimentación.
El concepto de pre-embrión pretende suavizar el hecho de que, aunque el experimento se haga antes de la anidación, de todos modos se está experimentando con seres humanos.