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Katia y Ana María: su arduo trabajo en Sujetando genera conciencia en la sociedad respecto a la inclusión, que favorece directamente a niños y jóvenes.

Como psicopedagoga, tuve la oportunidad que mi primer trabajo sea con un niño con problemas de comunicación, a partir de ahí, me enamoré de lo que hago y llevo 18 años en esto. Además, tuve la suerte de participar por años en un grupo de investigación sobre Autismo dirigido por Piedad Ortega de Spurrier, en ese espacio nos conocimos con Katia, ella venía con un largo recorrido como psicóloga clínica, trabajando con jóvenes con autismo, traía al espacio experiencias de inserción laboral y acompañamiento terapéutico con jóvenes que presentaban dificultades en la socialización y en la comunicación.

Coincidimos en diferentes ámbitos, seminarios nacionales e internacionales, grupos de estudio y diversos espacios de formación. Las dos nos graduamos en la Maestría en Psicoanálisis con mención en Educación en promociones distintas.

Nuestra visión coincidía en que no veíamos un diagnóstico con el que trabajar si no con sujetos que desean y tienen aspiraciones como todos, pero que ven el mundo de una manera diferente, nuestro objetivo en el trabajo individual era apostar por aquello que los chicos con los que trabajábamos nos podían mostrar.

Fui invitada por Katia al Programa, quien es la creadora de este espacio, primero como profesora, y después de un tiempo me preguntó si quería participar más intensamente y ayudarla a coordinarlo.

 

 

Programa “Sujetando”

“Sujetando” nació hace dos años atrás, pero tiene cultivándose muchos años antes en sueños y pensamientos. Nace tras la experiencia de trabajo cercano con personas en el ámbito de la inclusión, pues se mostraba recurrente, en los jóvenes y en sus familias la inquietud por el PORVENIR.

Este cuestionamiento usualmente se fortalece en la adolescencia, al terminar el colegio, surgen preguntas como: ¿Y ahora qué? ¿Qué lugar hay para mí, o para mi hijo, en las instituciones, en la sociedad, en lo laboral?

“Sujetando”, se abrió como un lugar que acoge a jóvenes y a sus familias en el proceso de transición hacia la vida adulta, con la intención de crear un espacio intermedio, buscando por un lado fomentar la independencia y autonomía en el adulto joven, y por otro, desarrollar un programa vocacional que les permita explorar diversas áreas de interés.

Nos interesa que cada joven pueda encontrar una práctica que ponga a circular un deseo activo por conocer, aprender y que la experiencia les sirva para encontrar un nicho en la cultura y una posible experiencia laboral que les dé mayor autonomía.

 

 

Afrontar la pandemia y continuar

Hace dos años, cuando iniciamos este Proyecto, empezamos con clases presenciales. En enero del 2020 todo parecía marchar bien hasta que a los pocos meses el confinamiento por causa de la pandemia puso de “cabeza” el mundo.

Este fue un evento que detuvo todo lo que se había planeado. Conversábamos todo el tiempo, cuestionándonos si fuese posible continuar o no con el programa. Hablábamos de diferentes posibilidades, parecía casi imposible poder seguir, añadiendo sobre todo el temor al contagio por el Covid.

Cuando el mundo se paralizó por motivos del Covid, los chicos asumieron el reto de pasar de lo presencial a lo virtual de una manera inmediata, sin titubeos, motivándonos a seguir y a creer en este Proyecto.

Ellos nos han enseñado que lo importante y valioso se construye a pulso con determinación, empeño y esfuerzo. Son ellos los que nos dan el empuje para también re-inventarnos desde enero del 2020 hasta la fecha.

Ellos nos impulsaron a regresar a la presencialidad, recordándonos siempre el tema de la bioseguridad y enseñándonos que hay salidas posibles, muy diferentes a las que uno pueda pensar e imaginar.

Si existe la posibilidad de nombrar la habilidad de los integrantes de este programa seria con la palabra “reinventar”. “Los chicos”, como cariñosamente los llamamos, son un ejemplo y nos han dado una lección de vida, enfrentando dificultades y aprovechando todo el tiempo las oportunidades que se presentan.

 

 

¿Qué ofrece “Sujetando” a los chicos?

Hoy en día, los chicos han podido explorar en Sujetando diversas áreas de interés, tales como: fotografía, cocina, experimentación musical, diseño de artesanías, teatro, radio-teatro, arte, cinematografía, entre otras.

Ellos nos han sorprendido y han sido el motor para que podamos llevar a cabo grandes proyectos; como la exposición fotográfica “Fuera de Serie”, en la que pusieron en común los trabajos realizados en el taller de fotografía dictado por la profesora Martha Delgado, así como la realización de un emprendimiento de venta de portavasos con fotos de Guayaquil tomadas por ellos que se denominó “Porta-Quil”.

Nos impresionaron también con la creación de una fantástica radionovela que trabajaron junto a la profesora Ariana Fuentes, en la que participaron de la creación del guión, voces en off, edición, etc., y que se la puede encontrar hoy en día en Spotify.

¡Cada uno de nuestros talleres culmina con un proyecto, y tenemos algunos cocinándose!, para nosotros, es importante que lo que ellos produzcan pueda ser puesto en común con la sociedad, y que se pueda poner en evidencia, las cualidades y talentos que nuestros chicos queridos poseen. Cada uno encuentra su lugar en lo que más le interesa y nosotros estamos aquí para acompañarlos en ese recorrido.

Los acompañamos, para que logren una independencia y sobre todo “un buen lugar en la sociedad y en la cultura”. Es maravilloso cuando ellos abren la puerta para mostrarnos su manera particular y fantástica de mirar el mundo.

¡Para delante!

Ha sido extraordinario notar que no hay edad para encontrar una vocación, y sobre todo gratificante poder ver como algunos de ellos (los chicos) han descubierto una habilidad que no se imaginaron.

Cabe mencionar que es un trabajo que no ocurre de la noche de la mañana, se requiere tiempo, pero sobre todo familias que deseen apostar por sus hijos, que crean que no todo está dicho en un diagnostico porque el deseo de aprender puede más, se puede aprender a un ritmo diferente al que comúnmente se plantea a nivel social.

¡Hoy en día nos queda la satisfacción de saber que “Sujetando” ha dado lugar a que el deseo se ponga en circulación y los efectos en los jóvenes, sus familias y en nosotras han sido sorprendentes! es esto lo que nos interesa transmitir a quien se interese por saber de este espacio de trabajo.

 

 

Escrito por: Ana María Bustamante Peñafiel, Psicopedagoga y Katia Raad Bassil, Psicóloga Clínica.

 

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