Tras la publicación del libro “Harry Potter y las Reliquias de la Muerte”, el diario británico The Telegraph relató que la autora, J. K. Rowling, había decidido finalmente hablar sobre el fondo religioso de sus libros, así como de su experiencia religiosa personal.
Rowling dijo que las referencias religiosas siempre fueron obvias para ella, pero que a pesar de eso, nunca deseó hablar del tema abiertamente. Esta es una de las características que marcan la serie de aventuras de Harry Potter: la mejor y más eficaz manera de comunicar un mensaje importante es no hablar de él muy claramente…
Rowling también explicó que las dos citas bíblicas grabadas en la tumba de los padres de Harry Potter resumen y casi representan toda la serie. ¿Por qué?
La primera cita viene de la Primera Carta de San Pablo a los Corintios (capítulo 15, versículo 26):
“El último enemigo en ser destruido es la muerte”.
En cuanto a la creencia en la vida después de la muerte, Rowling confiesa que se cuestiona al respecto y que la posibilidad de una vida después de la muerte le perturba mucho. Puede ser que el hecho de escribir libros como los de Harry Potter sea una forma de exorcizar el miedo a la muerte, para asegurarse a si misma que la muerte no es el final de todo…
La segunda cita es del Evangelio de Mateo (capítulo 6, versículos 19 al 21):
“Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón”.
La historia revela gradualmente las motivaciones internas de los personajes principales: si ellos luchan contra el mal o si son partidarios de la oscuridad. De esta forma, la serie también revela cual será su destino, si positivo o negativo, dependiendo de sus acciones.
Probablemente es este el significado de las palabras de J. K. Rowling cuando dice que las citas bíblicas, en particular la segunda, “resumen toda la serie”. Cada uno, de hecho, independientemente de “magias”, es en gran parte el responsable de su propio destino. Incluso de su destino eterno.
Vía Aleteia