¿Por qué es importante incentivar a los jóvenes a que hagan voluntariado?
La adolescencia siempre ha sido la edad de la rebeldía y de los grandes ideales. Todos recordamos cómo cuando éramos jóvenes soñábamos con poder independizarnos de nuestros padres, emprender nuestro camino y perseguir nuestros sueños.
Y aunque más adelante la vida nos “aterrice”, esos deseos de cambiar el mundo, nos animaron a trabajar por los demás, nos ayudaron a descubrir nuestra vocación y nos juntaron con personas muy valiosas para el camino de la vida.
Los chicos hoy
Hoy en día la situación es diferente, los jóvenes más que estar rodeados de ideales, están atiborrados de hechos. Esas ganas naturales de cambiar el mundo, se estrellan con malas noticias que les cuentan o que llegan de todas las latitudes o que les cuentan y ante todo lo que sucede, ellos solo pueden darle compartir.
Nosotros como padres y educadores, debemos acercarlos a realidades más concretas para demostrarles las oportunidades que tienen de generar pequeños cambios desde su entorno. Si bien, no van a solucionar el hambre en África, pueden compartir un refrigerio con personas en situación de calle; y aunque no puedan acabar con la guerra en Siria, definitivamente, pueden llevar algo de alegría a niños o abuelitos en hogares de acogida.
No importa el tamaño del gesto
El éxito de la estrategia está en mantener el reto pequeño para que la satisfacción sea grande. Es súper importante, que ellos sientan que pueden generar un cambio real y tener la oportunidad de producir sus propias ideas y planes ante una realidad concreta. Más allá de la ayuda que ya presta la sociedad, hay que estimular en ellos valores claves para su maduración. Entre estos están la solidaridad, la tolerancia, la responsabilidad y la empatía, entre otras.
Realmente así, veremos los frutos, donde la rebeldía “normal” de la adolescencia, encausada en el servicio a los demás, favorecerá a habilidades prácticas,..generando iniciativas de emprendimiento. Ya sea recolectando fondos, motivando sus destrezas de manejo de tiempo, estimulando la creatividad, y sobre todo, donde desarrollará amistades verdaderas; esas que se fundamentan en un objetivo compartido, que crece en las dificultades y que se disfruta de la satisfacción del deber cumplido. Y eso, es de las cosas más importantes que se construyen en la adolescencia.
Por: Ines Cobo de Gilbert
Psicóloga
Directora ejecutiva Sir Thomas More
