Ser el mayor, el pequeño o de los medianos en el orden de nacimiento entre los hermanos tiene un impacto en la inteligencia de la persona. Hasta ahora se pensaba que el orden cronológico en el nacimiento tenía más que ver con cuestiones de tipo emocional, pero ahora un estudio ha relacionado la puntuación en inteligencia con los primogénitos.
Desde hace más de 100 años, la comunidad científica y el público en general se han cuestionado si la posición de una persona entre sus hermanos tenía un impacto duradero en curso de la vida de esa persona. El hecho de que casi la mitad de los Premios Nobel hayan sido el hermano mayor o el primogénito, cosa que ha ocurrido también con más de la mitad de los presidentes de los Estados Unidos, mientras que el sentido artístico de los grandes literatos, pintores o personas con éxito en el mundo del espectáculo esté en manos de hermanos pequeños ha creado mucha expectación y curiosidad.
Los hijos primogénitos sacan nota en inteligencia
Ahora un estudio, realizado por psicólogos de la Universidad de Leipzig en Alemania, ha confirmado que los primogénitos puntúan más alto en inteligencia y, además, ha encontrado un efecto similar en el intelecto auto-reporte. El estudio se ha realizado con los datos de más de 20.000 personas de EEUU, Reino Unido y Alemania.
Sin embargo, en contra de lo que defendían teorías cientificas y creencias anteriores, no se han encontrado efectos en el orden de nacimiento sobre la extraversión, la estabilidad emocional, la amabilidad, la responsabilidad o la imaginación. Este hallazgo indica que el desarrollo de la personalidad está menos determinado por el papel dentro de la familia de origen de lo que se pensaba.
Esta nueva investigación empírica sobre la relación entre el orden de nacimiento y la inteligencia ha documentado que las actuaciones en las pruebas de inteligencia psicométricas disminuyen ligeramente de los primogénitos a posteriores nacidos. Por el contrario, la búsqueda de efectos nacimiento de orden sobre la personalidad aún no ha dado lugar a resultados concluyentes. El análisis confirma el efecto orden de nacimiento esperado sobre la inteligencia. También se observa una disminución significativa de un décimo de una tarjeta SD en el intelecto auto-reporte con el aumento de la posición de orden de nacimiento.
El orden de nacimiento no afecta a las emociones
Lo más importante, sin embargo, es que no se ha encontrado ningún efecto orden de nacimiento sobre la extroversión, estabilidad emocional, amabilidad, responsabilidad o la imaginación. Por tanto, según este estudio,el orden de nacimiento no tiene un efecto duradero en los rasgos de personalidad amplios fuera del dominio intelectual.
La edad de los padres también se ha estudiado como una posible variable dentro de los efectos sobre la inteligencia y el intelecto. Por ejemplo, una edad superior paterna en la concepción conlleva el riesgo de un mayor número de nuevas mutaciones genéticas que podrían disminuir la inteligencia en posteriores nacidos. Sin embargo, los resultados sugieren que la edad de los padres no es la fuerza impulsora que está detrás de los efectos sobre la inteligencia y el intelecto.
Vía: hacerfamilia.com