La época de vacaciones es un buen momento para viajar y conocer nuevos lugares en familia.
Se acercan las vacaciones, y aunque es la mejor época para los niños, a los padres esta les genera un poco de estrés y preocupación. Tener todo el día en casa a los hijos, implica mayor organización, especialmente cuando se trabaja y toca analizar con quién o dónde estarán durante la mañana los niños; qué actividades realizarán de forma que no se pasen viendo televisión, en el celular u otros aparatos electrónicos.
Ir a lo seguro
Justamente nos encontramos con que el clima en Guayaquil no favorece; lluvias, grillos, mosquitos, hacen que las actividades al aire libre sean complicadas. Por ello, muchas familias buscan realizar algún tipo de viaje o salir de la ciudad el fin de semana. Como no siempre es posible salir del país, dentro de Ecuador hay mucho por conocer. Es lamentable que hay niños que conozcan más lugares del extranjero que de su propio país y estas vacaciones pueden ser la oportunidad para reencontrar la diversidad y riqueza que este nos ofrece.
Además, podemos aprovechar las diferentes playas cercanas y la Sierra; Cuenca es una ciudad muy linda y contigua. También están los paseos en tren con diferentes destinos como el tren a la Nariz del Diablo y el tren del Hielo que sale de Riobamba.
Escatimando en gastos
Normalmente cuando pensamos en viajar, así sea un viaje cercano, es un gasto extra, pero siempre hay maneras de ahorrar. Busca llegar a la casa de un amigo, esta es una ventaja, sino alquilar junto a otras familias alguna casa o departamento, ayuda a dividir gastos.
Si salir de Guayaquil no es una opción, por suerte cada vez hay más cosas que hacer en nuestra ciudad. Les recomiendo seguir la cuenta de @mamagramerec en Instagram, donde todos los fines de semana se postea una “peque agenda” para enterarse de las diferentes actividades, ferias, shows infantiles.
También podemos…
Si movilizarnos resulta muy complejo por nuestra situación familiar, aprovechemos las vacaciones para aprender un deporte nuevo, enseñarles a nuestros hijos andar en bicicleta, jugar juegos de mesa o compartir con ellos alguno de los juegos de nuestra infancia (que parece que ya están en extinción), además de cocinar alguna receta familiar.
Aunque nos cueste creerlo, nuestros hijos no necesitan mucho, lo que sí necesitan sus vacaciones es tiempo en familia, descanso y un cambio de actividades y rutinas. Este es un momento para jugar y disfrutar sin tanta prisa. Conectémonos y divirtámonos con ellos en estas vacaciones.
Por Psic. Daniela Nugué
Máster en Asesoramiento Educativo y Familiar
Asesora en lactancia materna
