Los perfumes acompañan a la humanidad desde tiempos inmemoriales y son los encargados de otorgar un aroma agradable a las personas.
En torno a las fragancias, giran varios mitos y verdades que han ido pasando de generación en generación, hasta la actualidad. A continuación, Natalia Peña, cosmetóloga de Oriflame, nos ayuda a desmitificarlos y conocer cuáles son ciertos y cuáles no.
Los perfumes no caducan y se pueden conservar por varios años
Seguramente existe alguien que conserva dentro del armario un perfume que se sigue usando y que ha sido conservado hasta por tres generaciones de la misma familia. Lo cierto es que este ya ha caducado hace mucho tiempo. Así lo asegura la cosmetóloga Peña, quien afirma que los perfumes tienen un tiempo de duración determinado, desde la fecha en que son abiertos por primera vez.
Por ello, antes de comprar una fragancia, la experta recomienda verificar la fecha de caducidad, misma que se muestra en su caja o envase junto a un símbolo pequeño de un frasco de crema y con las letras 3M, 6M, 12M, 24M o 36M, haciendo referencia a los meses de duración.
Si un perfume caducado se sigue utilizando, lo más probable es que su fragancia haya cambiado y que no ofrezca la misma durabilidad.
Los perfumes se conservan mejor en la oscuridad y en sitios libres de calor
La experta señala que un perfume almacenado en la oscuridad y en un sitio no caluroso conservará mejor sus propiedades. La luz solar descompone las propiedades químicas del perfume por lo que puede modificar también su fragancia original.
Existen fragancias que le sientan mejor a una persona según su PH o tipo de piel
Natalia Peña señala que, si el PH de una persona es neutro, el perfume se fijará mejor; pero si el PH es ácido o alcalino, éste tendrá menos duración. De aquí la importancia de mantener una piel hidratada para conservar por más tiempo el aroma de un perfume.
Degustar granos de café ayuda en la elección correcta de perfumes al momento de la compra
La especialista señala que los granos de café tienen el poder de neutralizar el olfato, por lo que al masticarlas permiten poner en cero a este sentido para recibir un nuevo aroma.
Mientras más cara es una fragancia, es mejor
La calidad de un perfume no depende de su precio, sino de su concentración y del origen de esa fragancia. Existen en el mercado perfumes que tienen el aval de reconocidos perfumistas de París y su precio puede llegar a elevarse, pero así también existen perfumes de excelente calidad, de origen orgánico, que han sido elaborados con ingredientes naturales que pueden ser un poco más económicos, pero esto no disminuye su calidad, duración y permanencia de aroma en el cuerpo.
Las fragancias ayudan a mejorar el estado de ánimo
De acuerdo con Natalia Peña está comprobado que el perfume puede incidir en el estado de ánimo de una persona, además de brindarle seguridad y aumentar su autoestima.
Colocar 3 veces al día el perfume para que perdure su aroma
No es verdad. Los perfumes deberían ser aplicados una o varias veces al día sobre la piel, dependiendo de su concentración. Por ejemplo, si la concentración es de 1% – 3% o de 3% – 4%, se puede aplicar cada dos horas. Si es de 5% – 15% se puede aplicar entre 4 a 5 horas. Pero un perfume de concentración 20% – 30% se puede aplicar cada 8 horas y nuevamente poco antes de un compromiso social.
Existen partes del cuerpo que hacen más duradero el aroma de un perfume
Peña señala que para que el perfume perdure más en una mujer, puede colocárselo detrás de las orejas, en las muñecas, en el escote y cuello. Mucho mejor si recién ha salido de la ducha, pues así los poros de la piel estarán abiertos y receptarán mejor la fragancia. Si va a usar falda o vestido, también puede usarlo detrás de las rodillas, pues así el perfume se emanará también por esta parte del cuerpo.
En el caso de los hombres, la experta indica que las zonas recomendadas son detrás de las orejas, en los hombros, cuello y en las manos. Esta última parte es clave para los caballeros, ya que su saludo formal es dar la mano y así conseguirán que el perfume se quede plasmado por un momento en la persona a quien saludó, aunque en las circunstancias actuales, debido al distanciamiento social, esta práctica no es posible.
Pero existen zonas donde el uso de perfume no es recomendable. Por ejemplo, en el cabello, ya que, al contener alcohol y aceite, el perfume puede generar reacciones negativas sobre la cabellera o el cuero cabelludo. De igual forma no se recomienda su uso sobre la ropa ya que por sus ingredientes, podría mancharla.
La personalidad puede determinar el tipo de perfume más adecuado
Este enunciado es afirmativo. Peña explica que existe la psicología del perfume, misma que aplicada a la persona, puede determinar el tipo de aroma que le va mejor según su personalidad.
– Florales. A quienes tienen una personalidad muy femenina, suave y tranquila.
– Orientales. Para quienes evocan sensualidad, les va muy bien fragancias tipo ámbar o vainilla.
– Amaderados. Para quienes tienen una personalidad elegante y sofisticada.
– Aromas frescos. Para las personas alegres y ligeras. Les va bien perfumes con notas marinas o cítricas.
Sin embargo, esto no es una regla, solo una recomendación. La cosmetóloga señala que la persona puede usar el perfume con el que se sienta más cómoda y segura. Inclusive, existen las fragancias unisex que generalmente son con notas cítricas y son ideales tanto para hombres como mujeres que se sientan seguros de usarlas y por supuesto, que les guste ese aroma.
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