Las vacaciones escolares de tus hijos están por empezar… Y, pueden disfrutarlas al máximo sin estar conectados todo el tiempo a una pantalla.
Después de un año lectivo que se termina, entre suspensiones por paro y el largo feriado de fin de año, llegamos a las vacaciones escolares, momento tan ansiado por los niños como por los padres.
Con las vacaciones escolares, sin duda, se abre la posibilidad de dormir hasta más tarde, relajarse un poco y dedicar el tiempo juntos para compartir en familia, y descansar un poco de revisar deberes y tomar lecciones.
Y, aunque el aprendizaje formal llega a su fin, no significa que nuestros hijos deban pasar las vacaciones escolares conectados a una pantalla, sin hacer nada y desperdiciar su tiempo.
Vacaciones más productivas y divertidas
Para que estas vacaciones sean las más productivas y divertidas, lo primero que debemos hacer es establecer una rutina para los días de vacaciones. Reúnanse en familia y acuerden horarios que permitan el descanso y esparcimiento de todos, sin caer en el libertinaje.
No se trata de saturar su agenda de actividades y planes, sino de organizar las actividades cotidianas de una manera más relajada, para evitar pasar las vacaciones peleando porque nuestros hijos “no hacen nada” o porque “pasan en el celular”; si nos comprometemos entre todos, desde el principio, a un tiempo establecido para cada actividad y será mucho más fácil cumplirlo y mantener la armonía en el hogar.
También las vacaciones, son el espacio para explorar los intereses y talentos de nuestros hijos, concretemos esa clase de guitarra que nos viene pidiendo o permitámosle acompañarnos al trabajo si es que eso le despierta interés. Lo ideal es que se enfrenten a entornos nuevos para ellos, donde se le presenten retos diferentes y pueda seguir aprendiendo y creciendo, sin sentir la presión y la obligación del ciclo escolar.
Recuerda
Por último, aunque las obligaciones de papá y mamá, tanto en la casa como en el trabajo, no suelen suspenderse durante las vacaciones escolares, procuremos un tiempo especial para poder compartir con ellos. Que ellos nos perciban más relajados y más cercanos en actividades fuera de lo cotidiano como un viaje, un sencillo paseo por nuestra ciudad o una salida a comer nos va a permitir fortalecer nuestra relación familiar y tender los puentes necesarios para poder afrontar los retos que se vendrán en el siguiente año escolar. ¡Felices vacaciones!
Escrito por: Psic. Inés Melina Cobo de Gilbert, M.Sc., Rectora Unidad Educativa Thomas More.
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