“Una opción radical por la vida”, fue el llamado que hizo el Papa Francisco en su discurso ante la presidenta Michelle Bachelet y a demás autoridades de Chile. Una exhortación que tiene lugar a pocos meses de la despenalización del aborto impulsada por el gobierno de este país.
“El alma de la chilenía es vocación a ser, esa terca voluntad de existir. Vocación a la que todos están convocados y en la que nadie puede sentirse excluido o prescindible. Vocación que reclama una opción radical por la vida, especialmente en todas las formas en la que ésta se vea amenazada”, señaló Francisco.
En ese sentido, pidió hacer del país “una casa, una familia”, e indicó que para ello es necesaria la “capacidad de escucha” entre todos los sectores. Esto, especialmente en los más vulnerables, como los ancianos, los niños, los migrantes, los pueblos originarios, entre otros.
Lugar de encuentro para todos
El Papa dijo a las autoridades y sociedad civil que tienen un reto grande y apasionante que es seguir trabajando para que la democracia y el sueño de sus mayores, más allá de sus aspectos formales, sea de verdad lugar de encuentro para todos”.
“Que sea un lugar en el que todos, sin excepción, se sientan convocados a construir casa, familia y nación. Un lugar, una casa, una familia, llamada Chile”.
En ese sentido, invitó a recordar las palabras de San Alberto Hurtado: “Una Nación, más que por sus fronteras, más que su tierra, sus cordilleras, sus mares, más que su lengua o sus tradiciones, es una misión a cumplir’”, acoto el Papa.
San Alberto Hurtado es popularmente conocido por ser el fundador del Hogar de Cristo. Considerado como el patrono de los trabajadores en Chile. Su obra ha sido llevada a varios países incluido el Ecuador. |
Vía: Aciprensa