Es imprescindible conocer y reconocer qué tipos de violencia hacia la mujer existen en nuestras sociedades para poder combatirlos.
En Ecuador, según los resultados de la Encuesta Nacional sobre Relaciones Familiares y Violencia de Género contra las Mujeres (Envigmu), realizada en 2019 y aplicada a mujeres mayores de 15 años, que mide cuatro tipos de violencia, psicológica, física, sexual y económica: 65 de cada 100 mujeres han experimentado por lo menos un hecho de algún tipo de violencia a lo largo de su vida. Esto es: psicológica, seis de cada 10; física, cuatro de cada 10; sexual, tres de cada 10; y patrimonial, dos de cada 10.
La violencia hacia la mujer es una terrible realidad que debe enfrentarse para ser eliminada de nuestra sociedad. A diario mujeres y niñas son víctimas de maltrato por parte de hombres, de sus familiares o pareja, pero también de otras mujeres incluso de sus propias madres.
Es necesario saber que la violencia ha poseído núcleos familiares, a veces, por generaciones en donde se ha “normalizado” estas conductas con nefastas consecuencias de traumas físicos y psicológicos para las víctimas, sometidas a una vida de dolor y desesperanza e incluso arrebatándoles la vida misma.
¿Cómo puede una sociedad progresar con este tipo de violencia que destruye tantas vidas?
Debemos actuar: Por un lado responder contundentemente por medio de denuncias y su correspondiente castigo a los agresores. Darles voz y acompañar a las víctimas. Y debemos prevenir.
Prevención para su eliminación: La educación es la mejor vía. Educar en respeto, educar en autocontrol, en el diálogo, en autoestima, en tener un propósito de vida. Si lo vemos en positivo una persona que puede controlar sus emociones, que puede respetar diferencias, que tiene sentido en su vida, que es seguro e independiente no maltrata a los demás. Y estas son las herramientas que debemos transmitir, que ciertamente no son soluciones inmediatas, pero si eficaces.
Esta transformación, que requiere tiempo, es la única forma de salvar vidas, de salvar a las siguientes generaciones, de progresar como sociedad.
Escrito por: Cristina Valverde J. IG: cristinavalverdej
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