No hay que temerle pero sí debemos estar preparados… te invitamos a conocer cómo vivir una jubilación saludable. ¡Lee y comparte!
«Toda crisis genera desarrollo». Es un adagio en el mundo de la psicología que solamente puede ser aplicado cuando existe un desafío por delante que nos mueve a un proceso de adaptación a un entorno poco conocido; la jubilación será ese nuevo espacio al cual debemos adaptarnos, pero de manera saludable.
El ser humano, durante todas las épocas de su vida, atraviesa por un sinnúmero de situaciones dentro de las llamadas crisis o etapas del ciclo vital; estas conllevan desafíos en todas sus esferas de interacción —social, familiar, sentimental, sexual, etc.—, que dependerán de los recursos personológicos para su adecuado reconocimiento, afrontamiento y final adaptación.
De los recursos que hablamos, los personológicos son habilidades que han sido construidas en la personalidad del sujeto con base a sus experiencias significativas, generando una interrelación productiva con su entorno y la construcción de su realidad objetiva. Estos recursos potencian el carácter proactivo del sujeto, su autodeterminación ante la toma de decisiones y asunción de responsabilidades.
¿Jubilación una crisis?
De las crisis en mención, la psicología nos enseña dos vertientes. Una es la normativa que es parte del ciclo vital: nacimiento, adolescencia, matrimonio, embarazo, etc. Otra es la paranormativa que concierne a eventos no esperados dentro de la dinámica, como una enfermedad catastrófica, duelo, despidos, cambios ambientales, etc.
Es en la primera de estas —la normativa— que aparece la dinámica de la jubilación como parte de un proceso en el cual la persona abandona las labores que por tantos años le han estado acompañando en su proceso de desarrollo personal, y que le han permitido conseguir logros sociales y familiares de posicionamiento.
El afrontar esta etapa, que es parte del ciclo vital, conlleva un desafío, ya que, regularmente, dentro de las organizaciones no se lleva a cabo un proceso de desapego hacia la labor ejercida, sino, más bien, una interrupción abrupta de las mismas, lo cual no permite que el proceso de adaptación a este nuevo rol —el de jubilado— se desarrolle de manera saludable para la persona y su entorno.
Resistencias
Estudios realizados revelan que las personas generan una peligrosa dependencia al trabajo, incluso atribuyéndoles el adjetivo workaholic para describir tal acción nociva, que no promueve la jubilación saludable, sino una resistencia latente a aquel desafío.
Estas características generan elevados niveles de resistencia a adherirse a un proceso propio del ser humano, como la jubilación y el separarse de un entorno que, con sus fortalezas y debilidades, han generado un significado para esa persona, y que ha implicado hasta un sentido de pertenencia con la institución ahora por abandonar.
Estas resistencias, finalmente, desencadenan en estados emocionales de vulnerabilidad, como ansiedades, depresiones y estrés que, a largo plazo, pueden generar alteraciones fisiológicas ya conocidas con el neto y pleno origen en lo emocional. Esto, en mayor o menor medida, también coadyuvado por deficientes redes de apoyo familiar, que no generan la adherencia deseada al nuevo rol.
¿Qué hacer entonces?
Todos aquellos quienes estamos inmersos en instituciones debemos generar un estado pleno de conciencia sobre que nuestro paso por las mismas es efímero, bien sea por un despido, renuncia voluntaria o jubilación; en algún momento de la vida tocará el éxodo, y, entonces, es menester el aprovechar el instante en el que aun estemos en aquel lugar que nos ha dejado réditos durante nuestra estancia.
Por parte de las instituciones, es necesaria una mayor sensibilización con aquel proceso, ya que, al igual que se requiere gratitud por parte del colaborador, aquel mismo valor debe ser considerado por las autoridades, promoviendo una preparación saludable para la nueva etapa del ciclo vital de esta persona, detrás de quien descansa todo un sistema familiar.
Escrito por: César Valcárcel, Profesor de Psicología UEES.
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