Padres, familiares e incluso los tutores deben conocer más sobre la frustración infantil y cómo manejarla.
La frustración es una experiencia emocional que aparece cuando no se puede satisfacer deseos, proyectos, ilusiones, necesidades y se expresa a través de emociones tales, como: tristeza, angustia y enojo. Cada persona ya sea infante o adulto se enfrenta y reacciona ante la frustración de manera diferente.
Conociendo a la frustración infantil
Todo niño o niña ha pasado por un estado transitorio de frustración, es decir una duración corta dependiendo de la situación que ha vivido. Se puede afirmar que la frustración se manifiesta a través de emociones que generalmente son negativas para nuestro cerebro y lo satisfactorio es que se puede llegar a manejar de una manera asertiva.
Está comprobado que se puede emplear diferentes métodos para aprender a controlar la frustración en los niños y niñas, durante la infancia creen que el mundo gira a su alrededor por lo cual la frustración aparece, ya que ellos aún no han desarrollado el concepto de incumplimiento de deseos.
Si los padres o cuidadores le otorgan al niño todo lo que desea no aprenderá a tolerar el malestar que provoca la frustración, el intentar complacer siempre evita que se sientan frustrados, pero esto no favorece a su desarrollo integral como ser humano. Hay que tomar en cuenta que al complacer a nuestros hijos en todo se puede caer en la permisividad y sobreprotección, al infante en su desarrollo y adquisición de experiencias.
¿Cómo expresa la frustración tu hijo/a?
- Llanto.
- Gritos.
- Berrinche.
- Agresiones físicas a sí mismos o a quien lo acompaña.
- Desesperación.
- No se desarrolla resolución de conflictos: tu pequeño no tendrá otras opciones para resolver dificultades.
- Aventar o lanzar objetos que le causen frustración.
- No querer enfrentarse a las cosas que le causen frustración.
¿Qué hacer en caso de frustración infantil?
- Como padres siempre hay que mantener la calma, mostrar a tu pequeño una actitud positiva.
- Permite a tu hijo expresar lo que siente, no lo regañes cuando se encuentre frustrado.
- Evitar hacerle todas sus cosas, esto impide que el niño alcance sus propios retos.
- Permite que el niño se equivoque y ayúdalo a corregir sus errores, esto le enseñará como enfrentar la frustración en caso de no alcanzar lo que desea.
- Da el ejemplo, enséñale que no te rindes a la primera, hay que intentar muchas veces.
- Incentivar a identificar y controlar sus emociones.
- No ceder ante el berrinche o llanto.
- Anticipar lo que puede o no suceder al realizar sus actividades diarias.
- Marcar o fijar objetivos realistas, esto evita que el nivel de frustración sea elevado.
- Convierte la frustración en un aprendizaje, de este modo cuando vuelva a afrontar situaciones de frustración lo hará de una manera asertiva.
- Realiza juegos en donde aprenda a ganar y a perder, evita dejar que gane siempre.
- Motívalo a realizar actividades de relajación, estimulación sensorial y deportes.
Fuente: Cristian Chinachi, director de Tomatis Ecuador.
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