La salud mental de las madres es fundamental para el desarrollo y crecimiento de los hijos.
El 9 de mayo en México se conmemora el Día Nacional de la Salud Materna y Perinatal, en España se lo hace el primer miércoles del mes de mayo. Nosotros como ecuatorianos, aún no hemos destinado un día para este periodo importante del trabajo de ser madre: los primeros años, donde la salud mental materna debe ser valorada.
El concepto perinatal corresponde al momento que atraviesan la madre y el hijo desde el nacimiento, hasta el primer año de vida del niño, es este periodo inicial en el que madre e hijo irán creando o construyendo el vínculo filial. Hoy por hoy se considera uno de los momentos más difíciles y complejos de la maternidad, debido a que lo que vivan estará marcado por la experiencia de sí mismo frente al otro y no mediado por la palabra.
Además, en este periodo también se vive la lactancia, experiencia que sigue provocando un desvarío de las hormonas femeninas, lo cual causa una constante hipersensibilidad en la madre, es un periodo en el que socialmente hay mucha exposición por el deseo de conocer al nuevo miembro de la familia y esto acarrea consigo mismo muchísimos comentarios de las madres experimentadas a la nueva madre que puede provocar muchísima inseguridad.
Cabe enfatizar la gran responsabilidad que pesa sobre los hombros de la madre que debe cuidar de un ser humano pequeño e indefenso que no tiene palabras y que debe ser comprendido e interpretado por ella, que además, tiene horarios dispares y apetito a demanda porque está en crecimiento constante.
El cuidado de la salud prenatal y perinatal de la mujer garantiza la vida de un bebé sano, debido a que contempla cobrar completa consciencia tanto en la madre como en el padre de factores genéticos que puedan heredarse, desarrollo del feto y roles de cuidado que los padres deberán ir adquiriendo para el nacimiento del bebé.
Adopción del rol materno
Ramona Mercer, enfermera doctorada y profesora, promotora de la lactancia materna propuso la teoría Adopción del Rol Materno como un proceso interactivo que se conforma desde el deseo o no de ser madre hasta el vínculo que se establecerá entre la madre y el hijo.
Ramona considera dentro de esta teoría la edad de la madre, la experiencia del nacimiento, las actitudes de crianza, la salud, características de la personalidad, del bebé como de la madre, apoyo social y autoconcepto materno, alega que todos estos elementos podrán o no dar una creación del rol materno saludable garantizando así la calidad de vida del niño, sin embargo, este trabajo de autoconocimiento y decisión de maternar puede ir en contra del mismo deseo de ser madre.
¿Sabía usted amable lector sobre esta valiosa información? Fui madre por primera vez hace veinte años y yo, no la conocía, es con la escucha en mi consultorio de las mujeres que van decidiendo o no ser madres y de las que lo son que mi trabajo me lleva a informarme y a desear compartir esta información para poner bajo la lupa todo el trabajo que implica la maternidad y en este caso hablando solo del primer periodo de esa decisión.
También es desde la práctica de la escucha a estas mujeres que me permito compartir esta información para dejar de ver la maternidad como un momento único y pleno de alegría porque no todo el tiempo es así, la maternidad es una experiencia de vida que a las mujeres nos moverá y conmoverá hasta la médula, que nos empujará constantemente a crecer y superarnos y que sobre todo nos pondrá en el escrutinio de aquellos otros que nos miran.
Maternidad y la salud mental
Es importante tener claro que uno de los elementos a considerar en la maternidad, como lo decía Mercer, es el grupo de apoyo social y el autoconcepto que no puede faltar en la vida de una madre. Entiéndase por Apoyo Social esos espacios donde compartimos con otras amorosas que nos nutren y donde también somos esas otras amorosas para quienes lo necesitan y autoconcepto esa forma amable en la que hablamos de nosotras mismas y que viene influida por lo que oímos de los demás sobre nosotras y nos permitimos experimentar.
Es decir, una madre necesita grupo y una forma de apoyarla es respetar esos espacios y librarla de la culpa de permirtírselos, sin embargo, en una sociedad en la que las altas exigencias de los roles que vivimos están a pedir de boca, en donde se romantiza la maternidad no hablando de lo compleja que puede ser ¿estos espacios son viables? Esa es una pregunta que podemos revisar en otro espacio, por hoy, me parece suficiente aportar información nueva sobre la salud mental materna perinatal e invitar al respeto de esas mamás de estreno que también necesitan escucha y compañía.
Escrito por: María del Carmen Rodrigo, sicóloga clínica. Celular: 098 331 9545
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