Compartir:

¡Sí amigos y amigas amantes del anime de Pókemon, Ash al fin bien cumplido su sueño, es ya maestro campeón!

Pasaron más de 25 años para ver al pequeño Ash pasar de ser un entrenador inexperto de pueblo Paleta, a convertirse en el campeón mundial Pokémon… Pero te preguntarás: ¿Y qué mensaje me puede dejar eso que pueda aplicar en mi vida diaria? La respuesta es sencilla, muchos.

Empiezo por contarles que cuando empecé a ver este querido anime tenía 14 años, era un adolescente que soñaba con tener algún día mi propio Pokémon, pasear y combatir con él donde quiera que fuéramos… hoy la tecnología lo permite a través de juegos y apps descargables para nuestros smartphone… pero bueno, esta no es mi historia, sino la de Ash Ketchum, de cómo pasó de ser un «perdedor» a un verdadero «maestro Pokémon» y de la enseñanza que esto nos deja a cada uno de nosotros.

Un niño soñador pero inexperto

Ash empezó su camino quedándose dormido el día en que iba a escoger su Pokémon, su compañero con el que buscaría hacer realidad su sueño… ¡Sí, se quedó dormido! Entonces llegó tarde al Laboratorio del Profesor Oak (en los laboratorios se hace entrega a tres entrenadores de su Pokémon inicial, el cual puede ser uno de tipo agua, fuego o planta), sin embargo, al quedarse dormido a Ash se le ofreció un cuarto Pokémon, porque los otros tres ya habían sido designados a otros niños, ese poke era el ya mítico y mundialmente conocido Pikachu, sí la «ratita cuky» como la llamaba James integrante del equipo Rocket, del que ya hablaré después.

Ash y Pikachu empezaron mal su relación pero luego de un momento de vida o muerte, se volvieron inseparables, tanto que Pikachu nunca viajaba dentro de su pokebola (artefacto donde se guardan a los Pokémon), sino que le gustaba ir en el hombro de Ash o caminando muy cerca a él.

Ash de a poco fue atrapando más Pokémon, fue teniendo amigos entre ellos para mí dos de los principales durante estos más de 25 años, Misty y Brock, con quienes empezó su viaje, con ellos vivió muchas aventuras, participó en concursos de todo tipo, combatió en distintos gimnasios (necesario para ganar medallas y llegar así a participar en los campeonatos regionales).

En todo ese trayecto inicial Ash tuvo de némesis a Gary Oak, sobrino del Profesor Oak y un niño bastante orgulloso que siempre menospreció y se burló de Ash, como también el Team Rock, conformado por Jessie, James y Meowth, estos últimos siempre tratando de robar a Pikachu, porque vieron en él gran poder, de hecho esa era la misión de esta agrupación, robar Pokémon fuertes.

Los torneos y las derrotas

En su primer torneo, más por suerte que por otra cosa, Ash quedó en el puesto 16, aunque lo doloroso fue quedar en ese lugar debido a que su Charizard (uno de los poke más poderosos y preferidos por todos) no le hiciera caso, demostrando así su inexperiencia, dejando en Ash un durísimo golpe y también una enseñanza.

Luego Ash y sus amigos estuvieron viajando por otras regiones, capturando Pokémon y siguieron los concursos y torneos, pero también con ello llegaron las despedidas y llegada de nuevos amigos.

Esto se fue dando durante estos más de 25 años, donde Ash siguió aprendiendo de sus derrotas y ganando mucha más experiencia, de hecho Ash en más de 1.200 episodios llegó a capturas y entrenar a 96 Pokémon, en su mayoría los dejó en la granja del laboratorio del profesor Oak y a otros los dejó en libertad para que sigan su camino.

Es fundamental que les cuente que en total Ash perdió torneo en las ligas de:

Kanto, año 1999.

Johto, año 2002.

Hoenn, año 2005.

Sinnoh, año 2010.

Teselia, año 2013.

Kalos, año 2016.

Por todas sus derrotas muchos, me incluyo, lo empezamos a ver como el soñador que nunca ganaba… pero todo esto daría un giro, y ahí es donde empieza el mensaje que nos deja a todos.

Esfuerzo y amor

Después de tantas derrotas dolorosas, Ash y su fiel compañero Pikachu llegaron a la región de Alola, donde tuvo nuevos Pokémon, cada uno de ellos con una historia muy particular, estos eran: Pikachu, Rowlet, Torracat (que evolucionó de Litten) Lycanroc (que evolucionó de Rockruff crepuscular), Melmetal (que evolucionó de Meltan) y Naganadel (que evolucionó de Poipole).

Con este equipo y luego de duro e intenso entrenamiento, Ash logró coronarse como primer campeón de la región de Alola, lo cual le permitiría entrar al torneo mundial, donde empezó en el último lugar, y gracias a valiosos triunfos pero también varias pérdidas, pudo llegar a estar entre los 8 maestros Pokémon, donde buscaría ver cumplido su sueño, ser el maestro campeón Pokémon, proeza que no sería nada fácil de lograr, teniendo en cuenta el altísimo nivel de los otros 7 entrenadores, incluyendo al campeón invicto de Galar que solo había perdido una sola vez en su vida, Lionel.

Ash había batallado ferozmente en la semifinal contra Cynthia, catalogada como la segunda mejor entrenadora regional a nivel mundial, pero pudo vencerla gracias al empuje y garra mostrado por su equipo: Pikachu, Dracovish, Sirfetch’d, Dragonite, Gengar y Lucario, siendo este último en su estado mega quien le dio el paso a la final.

La gran final del campeonato Pokémon

Ya en la final el «Mostaza» como la comunidad amante del anime llamamos a Ash, entró con todo contra Lionel, quien no solo mostró su superioridad sino que también había copiado una estrategia de nuestro entrenador de pueblo Paleta, dificultando aún más todo.

Durísimos fueron cada uno de los combates pero ni Ash ni sus Pokémon se iban a rendir, entonces pasó lo impensado, colisionaron dos ataques poderosísimos el de Charizard dinamax y Pikachu (movimiento Z), lo que provocó que apareciera Eternatus, Pokémon legendario de la región de Galar, que usó su poder para disipar el estallido de ambos ataques, dejando a su vez estelas de energía dinamax (sí es un poco complicado de decir qué son, pero les diré que sirve para que un Pokémon crezca y tenga ataques extremadamente fuertes), esto dio a oportunidad a que Lionel use nuevamente la evolución dinamax pero ahora en su Pokémon Cinderace y Ash hizo que Pikachu también crezca y muestre su gran poder, ambos Pokémon atacaron con todo, pero Pikachu salió victorioso.

Ahora quedaban el Charizard de Lionel contra el Pikachu de Ash, fue un combate sin duda magnífico, tanto que hubo un momento en el que todos pensamos que todo había acabado para Ash, pero todos los compañeros Pokémon y todos los amigos del «Mostaza», incluidos el equipo Rocket hicieron fuerza para que Pikachu se levante, no se rinda y así lanzó un último ataque contra Charizard y este hizo lo mismo contra Pikachu… choque increíble en el que Ash y Pikachu salieron victoriosos y se llevaron el campeonato.

Un bello mensaje

¿Cuál es el mensaje? ¿Cuáles son las enseñanzas? Sin lugar a duda nunca rendirte pase lo que pase, aprender de las derrotas, entrenar duro, ganar más experiencia y jamás perder la confianza en ti, en tus amigos y también en tus Pokémon (esto último aplicado al anime).

En la vida se presentarán obstáculos, pero si damos el 100% los podremos superar y salir victoriosos, así que si has perdido muchas veces como Ash, y crees que no lo lograrás, te invito a que veas el video de la batalla final y recuerdes que nunca… pero nunca, debes rendirte… ¡Tú puedes!

 

Compartir: