Compartir:

El fenómeno geográfico que es una maravilla natural no solo de Brasil, sino del mundo entero.

Ubicadas al nordeste de Brasil, en el Estado de Maranhão, al pie del Océano Atlántico, se encuentran las Lençois Maranhenses. Estas maravillas naturales son un conjunto de inmensas dunas de arena, las cuales pertenecen al parque nacional que lleva su mismo nombre (Parque Nacional Lençois Maranhenses) y que ocupan un área aproximada de 150.000 hectáreas.

Durante los meses de lluvia en la zona, en medio de estas dunas, se forman pequeñas lagunas de agua cristalina. Al término de la temporada invernal, estos cuerpos de agua se llenan, tornando al paisaje en un espectáculo único en el mundo. Por tal motivo, es en esta temporada, que arranca a mediados de Julio, en la que miles de turistas se dirigen a Barrerinhas, un pequeño municipio del Estado de Maranhao. Barrerinhas es el punto de partida hacia las Lençois.

Decenas de camionetas 4 x 4 adaptadas con asientos en la parte de atrás, llevan por un par de horas, y por un rústico pero aventurero viaje en medio de arena y riachuelos, a una decena de visitantes a bañarse a las lagunas. Cabe mencionar que las hay de todo tamaño, pero entre las más grandes y visitadas están: “La laguna del gavilán” y “Las 3 Marías”.

Un pueblo de pescadores en medio de las arenas

Desde Barrerinhas se puede llegar a Atins. Este viaje toma alrededor de una hora y media en carro o una hora en lancha por el río. Este pequeño poblado de pescadores está dentro de la reserva, en la desembocadura del río Preguisa en el océano Atlántico. El pueblo pesquero está cambiando de actividad y dedicándose cada vez más al turismo, por lo que es fácil encontrar posadas y hoteles de todo presupuesto.

Desde este lugar, la visita hacia las dunas es más corta, toma solamente 40 minutos y, adicionalmente, se pueden visitar otros lugares ubicados en el recorrido desde Barrerinhas hacia las dunas.

Al llegar a la playa, lo que primero llama la atención son las decenas de personas practicando Kitesurf. Este deporte, relativamente nuevo, necesita de un buen viento para elevar una especie de cometa que, parado sobre una pequeña tabla, que permite realizar piruetas y correr a gran velocidad a lo largo del mar. ¡Y vaya que Atins tiene el viento que estos deportistas necesitan!

Es sin duda, por todo lo descrito, que las Lençois deben estar en la lista de lugares por visitar para los amantes de la aventura o simplemente para los que deseen sentarse a admirar un inigualable atardecer.

Para ver más fotos puedes seguirme en Facebook e Instagram como: @fototravelworld y para ver mis otros recorridos, en Facebook como @manuelaviles e Instagram como @manuelavilesec


Por
Manuel Avilés

Compartir: