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Son los momentos de “Estallidos cerebrales” los que muchas veces te han impulsado a tener grandes cambios.

Es una pregunta muy curiosa que hoy me la hago y se las hago a ustedes, porque se habla mucho del tema pandemia y sus cambios, poniendo como un antes y después de la vida: enfermedades, metodologías, formas de trabajar, estudios, en fin. Se atañe mucho los cambios positivos y negativos que hoy vivimos debido a la pandemia.

Ahora si vamos a la visión micro de la situación, ¿cada uno de nosotros es diferente a lo que era antes de la pandemia? Pues creo que esta es la propuesta actual, y no sólo poniendo como punto de referencia a la pandemia, sino como un hábito de vida el tener una versión diferente cuando tenemos sucesos importantes, de tal hecho entonces, de qué funciona que sigamos siendo los mismo, cuando nos ocurre algo.

Ante la pandemia estoy segura que quienes más hicieron un aprendizaje profundo fueron: quienes perdieron familiares y amigos, quienes perdieron negocios, quienes se enfermaron de gravedad y quienes tuvieron la valentía de ver el dolor ajeno y a través de ello aprendieron.

Es muy probable que algunos sigan teniendo las mismas actitudes, comportamientos y costumbres. No quiere decir que esto sea bueno o malo, sino más bien, es pensar: ¿Que estamos dispuestos a vivir para poder cambiar aquello que requiere hacerlo?

Esta pregunta deberías hacérsela siempre, porque sólo recuerda las veces que si has cambiado un hábito un poco negativo para tu vida por uno positivo, fue por decisión y amor propio o quizás fueron los resultados de unos exámenes que te llevaron de manera obligatoria hacerlo o fue un proceso legal que te llevo a tener precauciones sobre tus negocios u otros.

 

 

Estallidos cerebrales

Efectivamente son los momentos de “estallidos cerebrales” los que muchas veces te han impulsado a tener grandes cambios, ahora lo importante es ¿Cuál es el precio que estás pagando por ello? ¿Será más sencillo aprender a través de otros?

Quizás la pandemia fue un evento poco agradable para muchos, pero para otros, fue un evento más o no fue el estallido cerebral que necesitan para cambiar sus hábitos. Crear un nuevo hábito es ser un artista de la transformación y no todas las artes son tocados para todos los artistas, el arte del hábito de mayor impacto y de mayores resultados son los hábitos de pensamientos, el cual Elimina – Para – Pregunta y Transforma el pensamiento destructivo por otro nutritivo.

Los estallidos cerebrales deben impulsarse a crear algo nuevo de ti, y si ello no pasa, es que estas inerte ante los estallidos de la vida, estas pasando por alto aquellas lecciones evidentes de la vida y estás transitando en modo automático, no te pierdas en la propia vida, aprende y avanza, caso contrario eres un espectador de la vida viendo cómo avanza y tú estás en el mismo espacio, entonces luego te comparas viendo tus escasos avances o desventurados espacios de estancamiento, sin aparente comprensión de los sucesos, esto es simplemente porque no estás presente en aquellos estallidos que se te presentan para transformar tu vida.

 

 

Cambios reales

Entonces no es la pandemia que nos vino a enseñar, es el artista que existe en ti que tomó la mejor fórmula para sacar su mejor diseño de arte. Por ello a muchos nos puede ocurrir lo mismo, pero los resultados siempre son diversos porque mientras unos se quejan otros ven oportunidades.

El artista siempre tendrá mayor potencia y será más fácil poderlo descubrir cuando está en sintonía con Dios, quien está en esa conexión profunda y verdadera podrá divisar fácilmente el diseño de vida que desea, podrá estar presente en los estallidos, viendo en primera fila la verdadera lección para obtener el mayor provecho propio y de expansión.

Ten presente las siguientes claves:

1. Analizar los estallidos cerebrales propios o ajenos.

2. Crear hábitos de pensamientos.

3. Elimina – Para- Pregunta y Transforma

4. Sé congruente, vívelo y repítelo.

 

 

Escrito por con amor: Janeth Once. Correo: info@janethonce.com

 

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