El objetivo de este joven colombiano es ayudar a que otros cumplan sus sueños.
Cuando Juan Fernando Campo decidió cambiar de vida, fueron muchas las reacciones en su familia: “¡Estás loco!”; “¿De qué vas a vivir?”, le decían. Después de haber estudiado Ingeniería de Sistemas en Colombia, haber hecho una Maestría de Dirección y Marketing en España y de tener un buen puesto de trabajo en Panamá, no se podía esperar menos que un grito en el cielo por parte de su familia.
Juan Fernando, solo se sintió apoyado desde el inicio por su mamá. Ella confiaba en la intuición de su hijo. Situación que no lo dejaba tranquilo y que una y otra vez le martillaba la conciencia y el corazón para lanzarse a la gran aventura de darle la vuelta al mundo y convertirse en experto en lo que verdaderamente le gusta.
De gerente a mochilero
Juan Fernando nació en Pereira, Colombia, lugar donde vivió tranquilo y compartió con sus seres más cercanos. Él estaba contento con su vida, durante su infancia y adolescencia nunca sintió ningún deseo de salir del país. Fue en Panamá que se enfrentó con el sentido de su vida. Tras una experiencia de mucha exigencia laboral, incluso de maltrato, se cuestionó si lo que quería para sí mismo era estar “encerrado” en cuatro paredes para el beneficio de otro. Por lo que después de dos años y medio de trabajar en una firma reconocida a nivel mundial decidió renunciar.
Este joven colombiano cuenta que mientras estuvo en España, tuvo la oportunidad de hacer el Camino de Santiago. Esto le sirvió para adquirir una base de lo que sería su nuevo proyecto de vida. Hoy, con total libertad, plantea: “¿Por qué no te puedes dedicar a lo que más te apasiona en la vida? Si te gusta pintar, ¿por qué tienes que ser un ingeniero? Haz lo que te haga feliz en la vida. Vuélvete un especialista haciendo lo que te gusta hacer. Persigue tus sueños, cree en ellos”.
Juanito viajero: ser feliz
Después de tomar la dura y exigente decisión de no malgastar su vida detrás de una oficina, emprende la gran aventura de una de las cosas que siempre le había encantado: viajar. Fue así que crea la marca “Juanito viajero”.
Juan Fernando, ahora “Juanito”, decidió emprender su propia empresa que promueve el conocimiento de otras culturas y la ayuda social a poblaciones vulnerables, a través del turismo. Su principal objetivo es inspirar a que otros sigan sus sueños. Compartiendo con una comunidad de viajeros y 70,000 seguidores, a través de las redes, su experiencia del día a día mientras le da la vuelta al mundo.
Ayudar a los demás
Este joven profesional que se proyecta con tener una familia y encontrar a una mujer con la que pueda compartir sus sueños, expresa que hasta el día de hoy nunca se ha arrepentido. “En el amor está la clave de la felicidad”, dice “Juanito”, quien agradece profundamente haber tenido la oportunidad redescubrir el valor de la entrega al otro. Durante sus viajes ha buscado no sólo conocer y disfrutar de paisajes y comidas, sino se ha dado la posibilidad de ayudar, de aportar a otras culturas y compartir con gente que pasa verdadera necesidad.
Estuvo un mes en Grecia colaborando en un campo de refugiados, compartiendo con familias que han sufrido. Personas que a pesar de esto, muestran lo contrario, “como es el caso de una familia afgana que lo había perdido todo. Aún así tuvieron el detalle de invitarnos a su casa. Nos hicieron sentir súper bien. Para dar no tienes que tener nada”, reflexiona.
“Juanito” comparte que una de las actividades sociales que más lo llenaron fue durante su estadía en Kenia. Aquí, tuvo la oportunidad de visitar orfanatos y escuelas para trabajar con varios jóvenes sobre cómo perseguir sus sueños. En total se reunió con 10 grupos distintos. También pudo experimentar derroche de amor al visitar los orfanatos. “El amor recibido por ellos es impresionante. Cuando se te lanzan encima es indescriptible”, comparte.
“Juanito viajero” con siete meses de travesía ya lleva en su corazón un cúmulo de experiencias inolvidables. Le resta 1 año y 5 meses para terminar de darle la vuelta al mundo.
Puedes seguir a Juanito viajero en las redes: Facebook, Instagram y en su sitio web.
Vía: Aleteia
