Conocer el estilo de aprendizaje de cada niño nos permite acompañar mejor su experiencia educativa.
A la hora de aprender, cada persona sigue su propio ritmo y aplica las estrategias que mejor le funcionan. Poder reconocer en cada uno de nuestros hijos o estudiantes su estilo de aprendizaje nos ayudará a determinar qué métodos es mejor utilizar.
Según el psicólogo norteamericano David Kolb, el estilo de aprendizaje se configura a partir de la genética de cada uno, las experiencias de vida y las exigencias del entorno; por lo que es posible que en una familia se compartan varios estilos de aprendizaje.
Según Kolb, existen 4 estilos de aprendizaje:
- Estilo Convergente: está orientado a resolver problemas y poner los conocimientos en práctica. Se le facilita seguir instrucciones.
- Estilo Divergente: trata de generar varias alternativas al conocimiento y predomina la creatividad. Se le facilita crear varias soluciones para un problema.
- Estilo Asimilador: tiene facilidad para conceptualizar y teorizar los conocimientos. Se le facilita juntar conceptos dispares en una explicación integral.
- Estilo Acomodador: se desempeña mejor en la experiencia concreta y en la experimentación. Se le facilita adaptarse a los cambios del ambiente.
Ningún estilo de aprendizaje es mejor que otro, todos nos llevan a construir aprendizajes, pero ayuda mucho reconocerlos para apoyar mejor el proceso educativo. Para esto es importante poder fomentar el uso de ciertas estrategias que lo ayudarán a reforzar el conocimiento de acuerdo a su estilo.
Por: Psic. Inés Cobo de Gilbert
Directora Ejecutiva del Sir Thomas More
