Compartir:

Muchos jóvenes piensan que citar es una obligación engorrosa de lo académico, pero es importante saber por qué y cómo hacerlo.

Hacer una investigación como nos tocó a nosotros en el colegio que implicaba: escoger un tema, visitar bibliotecas, hurgar en grandes enciclopedias, sacar copias, subrayar, transcribir y armar un resumen; puede parecer una proeza para los estudiantes de hoy. Ese proceso que fácil nos tomaba varios días, y algunos reniegos, garantizaba que interiorizáramos la información y realmente aprendiéramos.

El objetivo era obtener datos que no teníamos a la mano para conocer una realidad que se nos hacía lejana. Poco importaba la forma del trabajo o registrar correctamente, antecedentes, contexto o bibliografía.

Los nuevos tiempos

Hoy, nuestros chicos tienen toda la información a la mano y pueden hacer el mismo trabajo que a nosotros nos tomaba varios días, dando unos cuantos clicks en su computador y ocupando apenas unos minutos de su tarde.

 Ante esto, el reto es otro. En el aluvión de información que los rodea, el verdadero desafío está en saber discriminar los autores válidos, sintetizar y en reproducir un propio criterio. Por esto es tan importante citar adecuadamente las fuentes bibliográficas consultadas, pues no tiene el mismo “valor” un trabajo respaldado por la última investigación de National Geographic que una del Rincondelvago.com

Conocer las herramientas

El método más difundido para citar es usando el manual APA, propuesto por la American Psychological Association en 1929, para estandarizar la presentación de trabajos escritos. La más reciente edición (sexta) fue publicada en 2017 y consta de 300 páginas. A continuación se detalla lo más relevante:

Sin embargo, aunque parezca un poco complejo, generar estas citas puede ser muy sencillo. Si realizamos el trabajo en Word, en la opición “Administrar Fuentes” o “Insertar cita” en la sección de Referencias, nos permite proporcionarle la información al programa y este las genera de manera automática.

Adicional a esto existen otros programas como Mendeley en el cual se puede hacer un banco de documentos para trabajos más largos. Ahí mismo existen tutoriales de cómo administrar las fuentes y solo con seleccionarla se añade al documento.

El verdadero trabajo está en lograr que los chicos registren adecuadamente..los datos de las fuentes que consultan mientras investigan y fomentar en ellos la honestidad académica de reconocer cuando están tomando lo escrito por otro. Es por esto que deben citarlo correctamente, ya que así pueden reconocer el trabajo de los demás y diferenciar qué partes de la tarea son verdaderamente aporte suyo.

Fuentes consultadas:
° Normas APA. (2018). Normas APA actualizadas (Formato APA) para la presentación de trabajos escritos. [online] Disponible en: http://normasapa.com/ [Acceso 14 Aug. 2018].
° UWSSLEC (2018). Keep Calm and Cite your Sources. [imagen] Disponible en: https://uwsslec.libguides.com/c.php?g=248430&p=1655413 [Acceso 16 Aug. 2018].° Servicio de Bibliotecas. Univ Extramadura (2018). Cita de recursos. [image] Disponible en: https://biblioguias.unex.es/c.php?g=572071&p=3944218 [Acceso 16 Aug. 2018].

Por Psic. Inés Cobo de Gilbert
Directora Ejecutiva Sir Thomas More.

Compartir: