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La responsabilidad social (RS) va mucho más allá de ser un poco más empáticos con el medio ambiente, es una forma de vida.

Responsabilidad social (RS)… Una sociedad con equilibrio, tranquilidad y oportunidades requiere de ciudadanos proactivos y comprometidos tanto con ellos mismos como con los demás.

La responsabilidad social se vive en distintos contextos, y sin ninguna duda, nos permite convivir con mayor armonía y seguridad. En ocasiones se suele pensar que la conducta individual no afecta a los demás, sin embargo, nuestras acciones pueden tener un impacto positivo o negativo.

 

 

RS en el contexto familiar

En el contexto familiar, la responsabilidad social puede verse en el cumplimiento de roles y tareas que implica convivir con los demás, también incluye la comunicación efectiva, el diálogo respetuoso, apoyo, contención emocional entre otros.

El hogar siempre debe ser el lugar seguro para cada integrante de la familia, sin importar  a edad que se tenga el amor y el respeto serán características propias de un núcleo familiar.

Proporcionar herramientas dentro de casa que impliquen el compromiso de todos para tener una mejor sociedad es de gran ayuda, acciones como reciclar, evitar consumir en exceso, saludar, ser cordial y educar con el ejemplo crea un escudo invisible que protege de muchas situaciones complicadas y proporciona un equilibrio a nivel social y ambiental.

Fuera de casa, la responsabilidad social se relaciona con contribuir positivamente a la comunidad y al medio ambiente, participar como voluntarios, realizar donaciones a organizaciones benéficas, fundaciones, albergues además de dar una satisfacción individual se convierte en un acto de inspiración para los demás.

Hablar acerca de consciencia social, moviliza a los demás a conocer su importancia. Muchas personas no hacen cosas a veces, por desconocimiento o porque no vieron estas conductas dentro de su contexto, así que, hablar de lo bueno impacta.

Todos debemos cambiar

Comportarse de forma adecuada, ser cordial, acatar las normas de tránsito, solidarizarse con las personas que requieren ayuda ya sea para cruzar una calle o acceder a un transporte público, ayudar a los adultos mayores, mantener los espacios sociales limpios, evitar pitar en el automóvil, ceder el paso, también son formas de activar nuestra responsabilidad social.

Quedarnos inmóviles esperando que la sociedad cambie por si sola, solo retrasara las cosas. Si queremos ver un cambio positivo, la acción empieza de forma individual. Alrededor siempre habrá personas que miran, admiran y aprenden de los demás. Vivir de forma saludable es una responsabilidad de todos.

 

Escrito por: Psic. Carol Obando, Directora Centro Internacional de PNL, Coaching y Psicología.

 

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