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¿Qué sucede cuando a pesar de todo no se logra salvar un matrimonio?

Generalmente crecemos con la convicción de casarnos para toda la vida. Desde muy pequeños o pequeñas nos hablan de cuentos de hadas que luego del matrimonio terminan con un final feliz. Sin embargo, no nos enseñan qué viene después de la boda. Durante la convivencia en pareja se pueden experimentar muchos altibajos y, aunque en ocasiones se superan, hay circunstancias que conllevan a la ruptura. Esto puede crear un vacío no solo quienes conforman la pareja, sino también, en la familia en general, pero sobre todo en los hijos, quienes al principio no asimilan, ni comprenden totalmente lo ocurrido.

Enfrentar la adversidad

Las rupturas son el resultado de una suma de eventos difíciles, así que para decidir un divorcio o separación de alguna manera ya se vivieron varios momentos que los han llevado a tomar esta decisión final. En caso que esto suceda, y que no tenga más remedio, es importante tener en cuenta las siguientes..recomendaciones..que pueden ayudar a sobrellevar esta compleja situación, en especial al interior del ámbito familiar:

  • Apoyo: es de vital importancia, acercarnos y ser redes de apoyo mutuas para que la ruptura sea más llevadera, si bien nunca será fácil, tener a alguien cercano para expresar lo que se siente puede ser de gran ayuda.
  • Comunicación: hablar con los hijos, encaminando el diálogo como un medio de solución, donde se les deje claro que los roles de papá y mamá continuarán, es decir, que el hecho de ya no ser una pareja, no cambia su papel en la familia.
  • Continuar con planes y metas: si anteriormente tenían metas conjuntas es hora de plantearse objetivos individuales para encontrar una estabilidad.
  • Hobbies: continuar con los hobbies que se realizaban o encontrar nuevos espacios para encontrarse con uno mismo.
  • Diálogo respetuoso: en el momento de interactuar con los niños, es necesario mantener el respeto al referirse a la pareja. Recordemos que es el padre o madre de tus hijos de quien hablas, si lo haces desde el rencor podemos herir a los más pequeños, creando una imagen negativa del otro. Esto puede tornarse en un ambiente tenso y abrumador, sintiendo que son personas no gratas y afectando su relación.
  • Interacción positiva: aunque al principio sea difícil volver a relacionarse con la pareja, es necesario que los encuentros sean con respeto, demostrando así coherencia con lo que se dice a los niños.
  • Respetar los espacios de interacción con los hijos: caer en situaciones donde se ponga en medio a los hijos no es adecuado. Hay que respetar los días que el padre o madre va a estar con sus hijos, sin condicionar, ya que es su responsabilidad estar pendiente de ellos.

Un divorcio o separación requiere de un proceso de duelo. Expresar lo que se siente con personas cercanas será de gran alivio, llorar si es necesario está permitido y continuar con las actividades para, poco a poco estructurar un nuevo panorama.

Puedes también elaborar una carta para la pareja donde se agradece por lo aprendido y vivido, cerrando con una nota que diga que empezarás una nueva vida. Esto te ayudará a asimilar las cosas. No importa si entregas o no la carta, al escribirla lograrás desahogarte, ten claro que después de la tormenta siempre viene la calma y lo importante es mantener a la familia unida.

Por Psic. Carol Obando
Directora del Centro Internacional de PNL & Coaching.

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