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¿Es cierto que debes alimentarlo cuando está resfriado pero no darle comida cuando tiene fiebre? Le preguntamos a los doctores qué es lo que debes hacer (y qué no) la próxima vez que suba la temperatura de tu hijo.

Por Kate Bayless y Nicole Harris
Traducido por Ana Cristina González I Foto: Getty Images

Cuando sube la temperature de tu hijo, te preocupas. Pero las fiebres pueden de hecho ser beneficiosas, ya que dan cabida a un efecto más fuerte del sistema inmune para ayudar al cuerpo a combatir la infección, dice Anne Tran, MD., pediatra de planta en Kaiser Permanente en Hawái. Sigue leyendo para saber cómo manejar la temperatura y pasar la fiebre.

Usa el Medicamento

Si la fiebre es moderada y tu hijo o hija se ven bien en general, podrías decidir que la fiebre siga su trayecto. Pero la Dra. Tran dice que también puedes aliviar la incomodidad con acetaminofén (para bebés mayores a 3 meses) o ibuprofeno (para bebés mayores a 6 meses). Ten en cuenta que los medicamentos ocultan los síntomas, sin eliminar la fiebre. “A lo sumo, los medicamentos van a bajar la fiebre en uno o dos grados Fahrenheit —apenas lo suficiente para hacer que tu hijo se sienta mejor,” dice Ari Brown, M.D., asesora de Parents y autora de Baby 411. Consulta a tu médico las dosis correctas.

No Dejes de Darle Comida si Hay Fiebre

Ignora ese dicho, “Come cuando hay un resfriado pero no cuando hay fiebre,” dice el pediatra David L. Hill, M.D., autor de Dad to Dad: Parenting Like a Pro. Los niños con fiebre pueden tener menos hambre de lo normal, pero cuando quieran comer, debes ofrecer una dieta saludable y balanceada. Los niños bien alimentados pueden tener mayor capacidad de combatir infecciones.

Mantenlo Hidratado

Los sudores de la fiebre pueden deshidratar a los niños, así que ofrécele mucha agua. Si ha vomitado o ha tenido diarreas, ofrécele más bien una bebida rica en electrolitos.

No Le Pongas Muy Poca (o Demasiada) Ropa

Es normal que un niño con fiebre quiera tener ropa más cálida que las personas a su alrededor. Pero la Dra. Tran dice que debes asegurarte de que no tenga demasiada ropa o esté cubierto con mantas muy pesadas, ya que estas pueden evitar que el cuerpo se deshaga del calor, aumentando aún más la temperatura. Tu niño también puede querer un clima más fresco a medida que la fiebre baja, el Dr. Hill recomienda no exagerar dicho clima frío.

Considera Utilizar Compresas Tibias

Si tu hijo tiene vómitos y no es capaz de mantener la medicina en su estómago, llena la bañera con uno 5 centímetros de agua tibia y utiliza un paño para exprimir algo de agua sobre el torso, brazos, y piernas de tu hijo, ayudándole a bajar la temperatura.


3 Consideraciones al Eliminar la Fiebre

Antes de llamar al médico, considera estos tres factores.
1. La Edad de Tu Niño
En general, mientras más joven sea el niño, más preocupante es la fiebre. Llama al doctor si tu niño:

• Tiene menos de 3 meses y la fiebre es de 100,4 °F (38° C) o más.
• Tiene entre 3 y 6 meses y la fiebre es de 102°F (38,8° C) o más
• Cualquier niño mayor a 6 meses con fiebre de 103° F (39,4° C) o más.

2. La Duración de la Fiebre
Para un bebé de 3 a 12 meses de edad, llama al médico con cualquier fiebre de 100,4° F (38° C) o más que haya durado más de 24 horas. También, llama al médico si la fiebre dura más de dos días sin mejorar si el niño tiene entre 1 y 2 años. Para niños mayores de 2 años, llama al médico si no hay mejora luego de tres días.

3. Otros Síntomas
Llama al proveedor de salud si notas ciertas señales que sugieran alguna enfermedad que requiere más tratamiento, como la faringitis, infecciones del oído, o infecciones del tracto urinario. Algunos síntomas preocupantes son episodios repetidos de vómito o diarrea, dolor fuerte en el oído, dolor de cabeza, dolor de garganta, rigidez en el cuello, desgano, dificultad para respirar, irritaciones sin explicación, e indicios de deshidratación (menor uso de pañales, disminución o desaparición de las lágrimas al llorar).

Asimismo, lleva a tu hijo a revisar si se está comportando de forma extraña, o si sufre de algún problema de salud crónico (como asma o diabetes). En pocos casos, la fiebre puede causar una convulsión febril—“pero estas convulsiones son, en general, inofensivas, y no causan daños permanentes,” dice la Dra. Tran.

 

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