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En un mundo en el que los chicos pasan tanto tiempo “conectados”, los padres debemos que saber cómo orientarlos.

Las redes sociales son un medio para comunicarse, relacionarse y acortar distancias con otras personas. También nos sirven para adquirir conocimiento y entender la ciencia. Estas son un ámbito más a desarrollar en el proceso educativo de los hijos y que hoy se suma como una responsabilidad más de ser padres.

Nuestro papel frente al manejo de las mismas no es distinto del que tenemos al enseñarles buenos modales, hábitos, nuestra cultura o creencias religiosas. Cuando hablamos de redes sociales nos corresponde hacer lo mismo: educarlos. Ya sea en “tiempo real o en virtual” debemos ofrecerles apoyo y estructura. Recordemos que en este tema también nosotros somos un referente, por lo tanto es importante que seamos un modelo de lo que queremos que nuestros hijos logren.

Aquí les dejaremos algunas pautas para que como padres puedas guiar a tus hijos en el uso adecuado de las redes sociales:

  • Aprende sobre las redes y sus herramientas más utilizadas para ayudar a mejorar el nivel de seguridad de tus hijos en el internet. Conoce cómo funcionan las redes, basta con informarnos, no es necesario abrir una cuenta en cada App.
  • Crea un clima de confianza con tus hijos, que sientan que pueden hablar contigo y buscar tu apoyo cuando lo necesiten o por cualquier duda.
  • Comparte..tiempo con ellos y no basta solo con la cantidad de tiempo sino también que sea de calidad. Somos padres 24/7, siéntate con tus hijos y aprovecha para aprender de ellos el manejo de las redes. Así podrás ver también cómo se manejan en ellas.
  • Concientízalos sobre las ventajas pero también de los riesgos que tiene el internet. Infórmate y enséñales a manejar las opciones habilitadas en cada App o red social para reportar o denunciar acoso o delitos informáticos.
  • Refuerza la autoestima de tus hijos, fomenta su autonomía y la responsabilidad de forma gradual y en relación a su edad y madurez.
  • Enséñales a tomar decisiones, permíteles elegir entre opciones (dadas por ti y acorde a su edad).
  • Establece límites, socialízalos con ellos. Respétalos y hazlos respetar esto les dará seguridad. Permíteles asumir las consecuencias al no cumplir con las normas estipuladas.
  • Fortalece sus valores y su pensamiento crítico en el día a día, para que así ellos los puedan traspasar a su mundo virtual.
  • Ayuda a tus hijos a entender las redes como un medio complementario de socialización y no como un único canal para relacionarse. Para esto es necesario fomentar actividades que impliquen desconectarse del wifi para conectarse con la familia y amigos en la vida real.

Controla y supervisa. ¡No te confíes!

Recomendaciones:

  • Enséñale a tus hijos a seleccionar sus amistadas. No aceptar a esos “casi conocidos” o amigos de sus amigos, ni mucho menos extraños.
  • Indícales cómo bloquear y restringir el acceso a su información o publicaciones.
  • Sugiéreles cambiar periódicamente las contraseñas y que estas incluyan minúsculas, mayúsculas y caracteres especiales.
  • Muéstrales sus derechos y los de los demás, empezando por el respeto hacia sí mismo y hacia los otros. Aconséjale no publicar fotos o información sobre otras personas sin su autorización.
  • Por último y no menos importante enséñales a identificar y expresar sus sentimientos y estados de ánimo en la vida real. Los medios de comunicación masiva no son siempre el mejor lugar para exponer los problemas.

No es recomendable:

  • Espiar a nuestros hijos invadiendo su privacidad o engañándoles para obtener información de sus perfiles o contactos. La confianza es muy frágil, por lo que es mejor hablar con ellos con sinceridad expresándoles nuestros miedos o molestias respecto a su manejo en las redes sociales.
  • Si tenemos conflictos por cómo están usando las redes, recordarles las reglas y normas ya que estas nos podrán ayudar y están por su bien. Fomenta la prudencia en las redes, recordarles siempre: “piensa antes de publicar o comentar”.
  • Cualquier comentario siempre hacerlo en privado, no de manera pública. Esto solo ocasionará que se cree un distanciamiento.
  • No satanizar a las redes sociales. No podemos culpar a estas de todos los problemas que tenemos con nuestros hijos. A veces el mal uso de las redes es solo el síntoma de otro problema, para lo que es importante mantener una comunicación abierta.

Por: Psc. Egda Orejuela A.

Máster en Neuropsicología y Educación.

Asesora Líder del IMF

 

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