En este mes de la mujer nos preocupamos por su bienestar, por eso compartimos varios consejos para tener una fertilidad femenina saludable.
Existe una relación importante entre fertilidad y hábitos saludables, es decir, si queremos aumentar la fertilidad es necesario considerar lo que estamos practicando diariamente, eso incluye alimentación, emociones, descanso y actividad física para mantener una salud óptima.
Una mujer que desea concebir debe empezar por vigilar sus hábitos y para ello es necesario conocer su cuerpo y necesidades nutricionales así podrá cumplir sus funciones adecuadamente. El cuerpo de cada mujer es distinto en todos sus procesos, es capaz de dar vida y eso debe valorarse y cuidarse.
Tener una fertilidad femenina saludable
Por otro lado, la infertilidad femenina se conoce como la incapacidad de concebir y puede ocurrir por los siguientes factores que son necesarios tomar en cuenta para evitarla:
Edad
Según American Society for Reproductive Medicine la mejor edad reproductiva de una mujer es cerca de los 20 años, la fertilidad disminuye gradualmente a partir de los 30 años, sobre todo después de los 35 años. Lo cual no significa que no haya probabilidad de quedar embarazada después de los 40 años si la mujer es sana, fértil y se prepara con los debidos cuidados.
Alimentación
Lo ideal es mantener una alimentación balanceada incluyendo los macronutrientes y micronutrientes que aporten la mejor calidad nutricional, considerando principalmente estos nutrientes que ayudan a mejorar la fertilidad femenina como ácido fólico (legumbres, frutos secos y vegetales de hojas verdes), vitamina A (lácteos, zanahoria y brócoli), vitamina E (aguacate, huevo y espinaca), hierro (granos, carne y quinoa) y zinc (frutos secos, granos y huevo).
Peso
El bajo peso puede causar pérdida del periodo menstrual, puede retrasar la maduración sexual en la pubertad y cuando la maduración está instaurada puede producir una ovulación irregular, por otro lado, en caso de sobrepeso y obesidad puede crear problemas en el embarazo como preeclampsia, diabetes gestacional, parto por cesárea, etc y además provocar problemas de fertilidad en la mujer porque se cree que el exceso de peso genera un ciclo hormonal anormal que altera la ovulación.
Sistema hormonal
Los ovarios producen hormonas sexuales femeninas llamadas estrógenos y progesterona, estas hormonas se ocupan del desarrollo sexual y de preparar la pared uterina cada mes para que pueda albergar y alimentar al óvulo fecundado durante el embarazo. Estas hormonas también contribuyen a la salud del corazón, huesos e hígado, es decir un riesgo de la función reproductora puede afectar también la salud en general.
Los desbalances hormonales suelen ser causas frecuentes de infertilidad, ya que, nuestras hormonas también se ven afectadas por uso inadecuado de anticonceptivos, consumo de alimentos cultivados con pesticidas y hormonas, uso de productos químicos frecuentemente, entre otros.
Psicológicos
El estrés crónico puede alterar los niveles hormonales y derivar en una ovulación irregular, por lo que, ante el deseo de quedar embrazada es importante considerar el estado psicológico de los miembros de la pareja. El estrés afecta la salud en general, de modo que, es necesario controlarlo para evitar sus consecuencias.
Ambientales
El tabaco y el alcohol son hábitos que influyen negativamente en la capacidad de fertilidad natural de la mujer, ya que, fumar puede provocar efectos perjudiciales en la menstruación como ciclos cortos e irregulares afectando a la reserva ovárica, por otro lado, según el Instituto Europeo de Fertilidad en estudios anteriores determinaron que las mujeres que consumían alcohol de manera frecuente eran menos fértiles, 55% frente a un 64% que no consumían o lo hacían de manera esporádica.
Escrito por: Melissa Coto, Nutricionista. IG: melcoto_
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