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La mujer fue, es y será siempre una de las más bellas creaciones de Dios, por eso cumple múltiples roles dentro y fuera de casa.

La mujer ha desempeñado un papel fundamental en distintos aspectos de la sociedad. En
el ámbito profesional, las mujeres han trascendido barreras, desafiando estereotipos
liderando campos gerenciales y administrativos los cuales generalmente fueron
manejados por hombres. La presencia de las mujeres en el área empresarial, política,
social y familiar, no solo aporta diversidad, sino también una perspectiva enriquecedora
para todos los sistemas.

En el hogar, la mujer desempeña un papel absolutamente valioso ya que su rol refuerza y
construye vínculos sólidos en las relaciones familiares. La maternidad es un rol desafiante
y con muchos matices. Ser madre es algo indescriptiblemente hermoso, eso no significa
que no tenga dificultad. Ser madre implica aprender muchas cosas que no se aprenden en
la escuela solo se parte de la experiencia vivida previamente y en general cada persona
quiere hacer cosas distintas para romper con patrones que tal vez afectaron su niñez. Y en
este ir y venir puede presentarse un desgaste emocional y físico.

A través del tiempo se ha reforzado el concepto de madres “perfectas” y este es un peso
que cargan las mujeres ya que se romantiza el concepto de maternidad donde se muestra
este rol lleno de calma, de fuerza física inagotable, de niños sin llanto etc. Y cada vez que
una mujer se convierte en madre y afronta la realidad se da cuenta que, en la práctica,
empieza un amor incondicional hacia sus hijos y también se da cuenta que el cuerpo se
desgasta, llega la visita del miedo, la impotencia y la frustración, sin embargo, es difícil que
cada mujer exprese lo que siente porque teme a ser juzgada por no ser perfecta. Así que
recordar que, tras el rol de una mamá, existe una mujer real, de carne y hueso, con
fortalezas, cualidades y defectos como cualquier ser humano.

 

 

La mujer de hoy rompe barreras

A medida que la sociedad ha ido evolucionando en cuanto a equidad en derechos y
oportunidades, hoy es muy relevante cuidar la salud mental y física ya que tener energía
para desarrollar tantos roles al mismo tiempo, como el profesional, la maternidad y el
área personal puede conllevar un exceso en la necesidad de aprobación y es ahí cuando
llega el disfraz de heroína dejando de lado las necesidades emocionales.

La mujer de hoy rompe barreras, y la contribución a la sociedad es inmensa. Por eso nos
queremos sanas. Cabe resaltar que esto es un compromiso de todos. Donde nos
relacionemos con los demás dando y recibiendo respeto.

La mujer cada día muestra más sus capacidades intelectuales y usa su voz para expresar lo
que piensa y siente. Así que, si tomamos como costumbre cuidar de nosotras de manera
integral, tendremos una sociedad que desempeña roles de acuerdo con sus
responsabilidades, capacidades y talentos más que a su género y ese es el verdadero
empoderamiento.

 

 

Escrito por: Psic. Carol Obando, Directora Centro Internacional de PNL, Coaching y Psicología.

 

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